La construcción de nuevas viviendas en la provincia de Barcelona se desacelera. Según un informe conjunto de la Associació de Promotors de Catalunya (APCE) y CaixaBank, durante el primer semestre del año se iniciaron 5.185 pisos, lo que representa un descenso del 10% respecto al mismo periodo del año pasado.
El estudio refleja un descenso en el arranque de nuevas promociones que contrasta con el aumento de pisos terminados, que alcanzaron las 5.751 unidades, un 17% más que el año pasado.
Descenso generalizado en la provincia
El informe detalla el comportamiento de diferentes comarcas del entorno de Barcelona, donde la actividad inmobiliaria ha mostrado grandes contrastes.
En Vilafranca del Penedès, se iniciaron 62 viviendas, un 343% más que las 14 del año pasado, y se finalizaron 66 pisos, un 38% más.
Promoción de viviendas protegidas de la Illa Acer
En El Vendrell, capital del Baix Penedès, se contabilizaron 14 viviendas iniciadas, un 56% más, y 13 acabadas, un 19% menos.
Por su parte, Igualada, capital de la comarca de L’Anoia, registró 95 viviendas iniciadas, un aumento del 692%, y 36 terminadas, un 200% más que el año anterior.
Finalmente, Vilanova i la Geltrú vio caer los proyectos iniciados un 31%, con 92 nuevas viviendas, aunque se finalizaron 341, lo que supone un aumento del 104%.
Un mercado bajo presión
El descenso en el inicio de nuevas obras llega en un contexto de tensión en el mercado de la vivienda en Barcelona y su área metropolitana. Los precios del alquiler y la compra siguen subiendo, mientras la oferta de pisos disponibles no crece al mismo ritmo.
La promoción de vivienda social de la calle Veneçuela de Barcelona, en el 22@
La oferta de vivienda nueva sigue siendo insuficiente para cubrir la demanda existente, especialmente en la capital catalana, donde los retrasos urbanísticos y el coste del suelo limitan la puesta en marcha de nuevos proyectos.
El informe de APCE y CaixaBank apunta que, pese al aumento de pisos finalizados, la tendencia a medio plazo podría ser negativa si el número de obras iniciadas continúa cayendo. La falta de nuevos proyectos afectará a la disponibilidad futura de vivienda, especialmente en zonas donde la demanda se mantiene alta.
Un reto estructural
Los datos refuerzan la percepción de que la provincia de Barcelona se encuentra en un momento delicado para el acceso a la vivienda, con un desequilibrio persistente entre oferta y demanda.
Aunque algunas comarcas experimentan repuntes puntuales, la tendencia general en la provincia apunta a un enfriamiento del ritmo constructivo que podría agravar los problemas de acceso a la vivienda en los próximos años.