Alfred Bosch (Barcelona, 1961) es el líder de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona. Bosch afronta su primer mandato en la oposición municipal tras pasar, entre 2011 y 2015, por el Congreso de los Diputados. El concejal republicano da por hecho que será el candidato de ERC a las elecciones municipales de 2019 y que lo hará con una lista con la que espera alcanzar la alcaldía. Ensayista y escritor, ha recibido los premios Sant Jordi de Novela (1998) y el Prudenci Bertrana (2006), entre otros galardones. 

¿Qué valoración hace de la gestión de Ada Colau en estos casi tres años de gobierno?

Ha sido una gran decepción. Después de las elecciones, Xavier Trias reconoció la victoria de Ada Colau y renunció a ser una alternativa. Nosotros decidimos darle un voto de confianza. Pero enseguida vimos que los 'comuns' no cumplían lo que prometían, que actuaban de una manera aislada. Incluso, en ocasiones, de manera dogmática. Nosotros queremos una ciudad diferente, una Barcelona con autoestima, y ahora la autoestima está tocada en Barcelona. Lo más importante de un alcalde o alcaldesa es que quiera a su ciudad y que anteponga la ciudad a posiciones ideológicas o dogmáticas. En el caso de Colau, está por demostrar que sea así. Para nosotros, Colau ha supuesto un desengaño considerable. Hace tiempo que hacermos una oposición neta para ser una alternativa de gobierno. Barcelona tiene mucha fuerza, pero no está bien gobernada.

¿Es la vivienda el principal problema que tiene la ciudad?

Sí, es uno de los principales.

¿Y qué propone ERC para abordarlo?

De entrada, no proponer más de lo que se puede hacer. Barcelona tiene que hacer lo que promete y no prometer lo que no puede hacer. En un problema complicado en el que no hay varitas mágicas. Es un tema que requiere hablar con la Generalitat, el Estado y las autoridades europeas. Es obligatorio hacer un cambio en la legislación española mientras sea un tema que dependa del Estado. Obliga a dedicar todos los recursos posibles a hacer vivienda pública, algo que no se está haciendo. Por eso votamos en contra del plan de la vivienda. 

"Enseguida vimos que los 'comuns' no cumplían lo que prometían y que, a veces, actúan de manera dogmática"

¿Qué está haciendo mal el gobierno de Colau en vivienda?

Cuando se tienen 100 millones de superávit cada año, y con una situación tan devastadora en el ámbito de vivienda como la que tenemos, dedicar la mitad del superávit a la vivienda no es una exageración. No ha habido voluntad política de hacerlo. Colau, que tanto defendía a la gente que se quedaba sin casa, lo debería entender. Este va a ser el mandato en que menos vivienda pública se va a hacer en Barcelona. Sólo se construirán 300 pisos sociales de alquiler. Es un mínimo histórico. Colau construye menos pisos sociales que Trias y el PSC. ¿Qué está pasando? ¿Qué engaño es éste? Será el mandato en el que más gente joven se habrá expulsado de la ciudad. Acabaremos el mandato peor de lo que lo comenzamos. Y lo haremos de la mano de una alcaldesa que era la campeona de la vivienda digna. Los alquileres, probablemente, se habrán doblado al final de mandato.

¿Tiene el turismo parte de la culpa del aumento de los precios de los alquileres?

Culpabilizar al turismo es otro de los grandes errores que ha hecho cierta gente. El turismo es una oportunidad. Lo que es evidente es que tenemos que cambiar el tipo de turismo. Pasar de la cantidad a la calidad, pasar de un turismo de prácticas ilegales a un turismo regulado. Los pisos turísticos hay que combatirlos porque son ilegales, no porque son turísticos. Tenemos que conseguir que sea una actividad regulada, como todas las otras. Y después hay que ir a buscar un turismo de calidad. Y para ello es necesario que haya salarios dignos. Barcelona tiene un magnetismo enorme. Si podemos ser París no sé por qué nos empeñamos en ser Cancún. Pero lo que no podemos es ser París con salarios de Cancún. ¿Por qué en Francia el sector del turismo es un sector que no provoca este rechazo? Porque es un sector altamente regulado, enfocado al turismo de calidad y con un salario mínimo que es el doble del de aquí. Habrá gente que dejará de venir cuando vea que lo que ofrecemos es un turismo basura.

Alfred Bosch, en su despacho, durante la entrevista con Metrópoli Abierta / ÁLVARO VENTURA



¿Votará ERC a favor del tranvía por la Diagonal?

Nosotros estamos a favor del tranvía por la Diagonal, pero queremos ver que lleva el gobierno a votación. Si lo que lleva es una profesión de fe, ya le digo que no estamos aquí para hacer religión. Es un medio de transporte, no una profesión de fe. Nos han presentado estudios técnicos, pero no hay un proyecto ejecutivo. Lo que se tiene que votar es el proyecto ejecutivo. Nos tienen que decir exactamente qué se hará, por dónde irá y qué costará. Hay temas importantes que nos deben aclarar. El gobierno tiene que hacer los deberes con el tranvía, no hacer proclamas. Lo primero que nos tienen que decir es cuándo habrá un convenio con la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) porque sin este documento no pueden poner ni un rail. El tranvía es competencia de la Generalitat. Es un transporte metropolitano que depende de la ATM, donde la Generalitat tiene mayoría. Como el metro y los FGC. También es necesario que nos digan que pasa con el operador privado. Ahora el Trambesòs y el Trambaix los gestiona una empresa privada. ¿Nosotros, ahora, tenemos que beneficiar a una empresa privada cuando los estudios dicen que se van a doblar los viajeros? Ya nos han dicho que no se rescatará, que cuesta mucho dinero, y que el tranvía continuará gestionado por un operador privado hasta el 2032. Hay aspectos que no vemos claro. El gobierno ha convertido el tranvía en un objeto de veneración y no habla de otras infraestructuras de transporte importantes, como la L-9, que también pueden a ayudar a resolver la conectividad metropolitana.

"El gobierno ha convertido el tranvía en un objeto de veneración y no habla de otras infraestructuras de transporte importantes"

¿Cuáles tienen que ser las grandes prioridades de Barcelona para los próximos años?

Se podría resumir en recuperar la autoestima, y esto se traduce en poner en marcha la interconectividad metropolitana, en saber reaccionar a la negativa de la Agencia Europea del Medicamento a instalarse en Barcelona, en la captación de inversiones y empresas, en blindar el congreso de móviles... Todo esto genera progreso y prosperidad que después puedes repartir. Él éxito tiene que existir para poder repartir.

¿El Mobile peligra?

Tenemos un gobierno que entró sin creer en el Mobile y que ahora asegura que ha cambiado. No basta con palabras. Tienen que ser capaces de afrontar cosas como una huelga de metro, que duró 12 semanas y amenazó la continuidad del Mobile. No nos podemos permitir una huelga como esa por los viajeros, por los ciudadanos, porque ponemos en riesgo un gran evento que da riqueza e inversión a Barcelona. El gobierno tiene que ir a los hechos, coger al señor John Hoffman y buscar la manera de afianzar el acuerdo con el Mobile. Tampoco se pueden poner palos a las ruedas a inversiones culturales como el Hermitage. ¿Queremos un turismo de borrachera o queremos un turismo cultural? No sólo necesitamos buenas palabras, sino que necesitamos una buena gestión encaminada a recuperar el optimismo de Barcelona.

¿Qué opinión le merece la multiconsulta de Colau?

Habrá que ver si tira adelante porque ha sido impugnada. Hemos visto dos consultas, organizadas por los vecinos, una por el albergue de la Vila Olímpica y otra por la Superilla del Poblenou. Éstas les han ido en contra y no las reconocen. No reconocen las que surgen de la calle y dicen que impulsarán otras desde los despachos. Quiero ver cuáles son las preguntas exactamente y ver si son relevantes.

¿El agua se tiene que remunicipalizar?

Este parece otro tema de fe, de religión. Hay que explicar cómo se hará y cómo se pagará. Ahora hay una empresa privada que lleva la gestión. ¿Hay quejas importantes por el servicio del agua? No. De las eléctricas hay más. ¿Por qué empezar por el agua, entonces? ¿Es verdad que costará entre 500 y 1.000 millones la remunicipalización? Es un tema que se tiene que hablar en el área metropolitana porque afecta a la gran mayoría de los 36 municipios. Nosotros seríamos partidarios de hacer lo que se hizo en Berlín, explicar lo que costará y entonces llevarlo a votación a todos los municipios afectados del área metropolitana, no sólamente a Barcelona. Pero parece que la idea es sólo hacer una consulta en Barcelona sin decir qué costará el cambio y sin preguntar al resto de municipios. No lo veo claro. Veo bien que haya un servicio público de agua, pero expliquémoslo todo. Si no lo hacemos así, nos quedaremos sólo con la proclama.

"Sobre remunicipalizar el agua hay que explicar qué costara y después llevarlo a votación a todos los municipios afectados del área metropolitana" 

¿Cómo repercute la falta de Govern de la Generalitat en Barcelona?

El 155 afecta al funcionamiento de Barcelona. Hay muchas inversiones que dependen de la Generalitat. Afecta a cosas como la renta garantizada, el transporte, la educación. También afecta que desde Madrid se haya aprobado un decreto express que ha permitido la salida de las sedes sociales de las empresas de Catalunya y de Barcelona. Y fue apoyado por el partido que llevaba la promoción económica de la ciudad. Se ha puesto sobre la mesa un instrumento que permite cambiar algo tan importante como la sede social sin consultar a los accionistas. Esto acaba haciendo daño a la ciudad. Ha habido una ofensiva del Estado para desproveer a Barcelona de sus recursos y poner en peligro las inversiones del gobierno catalán.

Alfred Bosch en su despacho del Ayuntamiento de Barcelona / ÁLVARO VENTURA



Bosch quiere conocer el proyecto ejecutivo del tranvía por la Diagonal antes de votar / Á. VENTURA

Se ha suspendido el pleno de investidura en el Parlament. ¿Augura que Carles Puigdemont será el próximo president de la Generalitat o cree que se buscará una alernativa?

La posición del partido es muy clara. El president del Parlament, Roger Torrent, es quien marca los pasos a seguir. No renunciamos a la investidura de Carles Puigdemont, que es el presidente legítimo de Catalunya. Lo continuaremos intentando. Lo que no haremos es hacernos la puñeta entre los que queremos la República Catalana. La responsabilidad última es del Estado español, que suspendió un gobierno legítimo. Ha intentado impugnar el nombramiento de Puigdemont a través del Consejo de Estado y no lo ha conseguido. Después, lo ha intentado a través del Tribunal Constituconal y lo ha conseguido a medias. Se pasan la ley por donde les parece con tal de frenar lo que salió de las urnas. Y este es el problema.

Acaban de filtrarse unos mensajes de Puigdemont al exconseller Toni Comín donde le dice que el proceso ha fracasado y que él ha sido sacrificado. ¿Qué le parecen?

Me lo han comentado, pero no los he visto. No los puedo comentar sin verlos. Lo que puedo decir es que al final ya encontraremos la fórmula. Las fuerzas independentistas ganaron las elecciones, tienen la mayoría parlamentaria y tendremos un presidente que defenderá la República Catalana.

¿No ve usted unas nuevas elecciones a finales de primavera?

Si sale a la calle y pregunta a la gente si quiere unas nuevas elecciones, la respuesta está muy clara.

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