Presuntas irregularidades en las oposiciones a la Guardia Urbana. Distintos sindicatos policiales han confirmado a Metrópoli Abierta que en la prueba de cultura general que se celebró el pasado 3 de octubre se pudieron producir anomalías. Supuestamente, aspirantes a agentes de la policía local utilizaron los móviles para consultar información y copiar en los lavabos.
Según los datos a los que ha tenido acceso este medio, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha pedido la apertura de una investigación interna con el objetivo de esclarecer si se ha producido una vulneración de derechos y la credibilidad de la institución de la Guardia Urbana "puede estar dañada", indica el secretario de Organización de CSIF, Eugenio Zambrano.
EL TRIBUNAL, AL CORRIENTE
El Sindicato de Agentes de Policía Local (SAPOL), el portavoz Jordi Rodríguez Lima, explica que las oposiciones se hicieron en Fira de Barcelona y en las facultades de Derecho y de Económicas de la Universitat de Barcelona. "Presuntamente, hubo opositores a los que se permitió ir al lavabo con el móvil, un momento que habrían aprovechado para buscar las respuestas". Rodríguez Lima afirma que el tribunal tiene constancia de los hechos y está haciendo las oportunas comprobaciones.
Metrópoli Abierta ha tenido acceso a un chat en el que un opositor denuncia que vio cómo había gente que copiaba en las instalaciones de Fira de Barcelona. "Dejaban ir al baño con el móvil en mitad del examen de cultura", indica el usuario, que califica la organización de lamentable. "La gente tenía el móvil en las piernas e iban de tres en tres al lavabo". El representante de UGT, Juan Francisco Rodríguez, estuvo en Fira de Barcelona. "No vi nada. Había mucha gente. Si alguien lo vio, lo tenía que haber denunciado. Esa persona se puede estar jugando su plaza", subraya.
Chat sobre las oposiciones a la Guardia Urbana
El sábado, los aspirantes se examinaron de inglés, el psicotécnico y de cultura general. Este examen consistía en 50 preguntas con cuatro respuestas. El año pasado, la prueba era muy difícil y suspendieron buena parte de los que presentaron. Este 2020, el examen tenía que ser más fácil. A las pruebas para acceder a la Guardia Urbana se han inscrito más de 6.500 personas. Las pruebas eran vigiladas por funcionarios del Ayuntamiento.
CSIF asegura que las irregularidades "alcanzan una desproporción de considerables dimensiones", lo que denotaría "una falta de control y grave desorganización". Además del uso de aparatos electrónicos en los lavabos, el sindicato denuncia la "transmisión de instrucciones erróneas para el desarrollo de la prueba psicotécnica".
YA PASÓ EN TIEMPOS DE XAVIER TRIAS Y SE REPITIERON LAS PRUEBAS
No es la primera vez que las oposiciones de acceso a la Guardia Urbana acaban en polémica. En 2013, el alcalde Xavier Trias tomó la decisión de repetir dos de las pruebas después de que 50 opositores se quejaran a la síndica de greuges de Barcelona. Los aspirantes denunciaron que se permitió copiar y hacer uso de móviles y otros aparatos electrónicos.
Desde entonces, las personas que hacen las pruebas tienen que dejar todas sus pertenencias en una bolsa. "Las normas son muy claras", dice Rodríguez (UGT), al que por ahora no le constan denuncias formales. Rodríguez recuerda que son aspirantes a policía y que la ética tiene que estar fuera de toda duda.