Tres concejales de Colau, amenazados por la límitación de mandatos del código ético
Janet Sanz, Laura Pérez y, posiblemente, Eloi Badia podrían tener que pasar por un proceso de validación como la alcaldesa para repetir en la lista electoral
29 mayo, 2022 00:00Noticias relacionadas
El pasado jueves, 19 de mayo, Ada Colau anunció que se presentaría a un tercer mandato. La alcaldesa concurrirá a las elecciones de mayo de 2023 tras ganar los comicios de 2015 por un concejal a la CiU de Xavier Trias, 11 a 10. Y perder las de 2019 por unos 5.000 votos menos que Ernest Maragall (ERC), aunque ambos partidos sacaron el mismo número de ediles, 10. Colau logró la vara de mando por segunda vez tras alcanzar un pacto con el PSC y recibir el aval de Manuel Valls en la investidura.
A pesar de que había repetido en distintas ocasiones que no repetiría como alcaldable, lo hará. Y para ello la alcaldesa tuvo que recurrir a la excepcionalidad que prevé el código ético de Barcelona en Comú. El punto 3.5 establece que los cargos electos limitarán "su mandato a dos legislaturas consecutivas". Ahora bien, "excepcionalmente" se podría prorrogar un mandato más siempre que se dé "un proceso de discusión y "validación ciudadano" [ver aquí el código ético del partido de Colau].
AVAL MASIVO DE LAS BASES
La bases de Barcelona en Comú avalaron de forma masiva la petición de que Colau repitiera como candidata en un acto en el barrio de la Marina encabezado por el ministro de Universidades y mentor de Colau, Joan Subirats. En el acto, Subirats subrayó: "Hacemos una votación muy importante. Hoy no sólo decidimos si le pedimos a Ada Colau que sea la candidata de Barcelona en Comú, hoy también decidimos trabajar juntos para que Ada siga siendo la alcaldesa de Barcelona”.
Con el futuro de Colau aclarado y con el partido ya de precampaña, Barcelona en Comú tiene que decidir si los concejales que llevan dos mandatos en el consistorio se quedan fuera o repiten. Si se decide que forman parte de nuevo de la lista, las personas afectadas deberán pasar, como la primera edil de la ciudad, un proceso de validación. Esta situación afecta a Janet Sanz, Laura Pérez y, posiblemente, a Eloi Badia, que tomó posesión como regidor en noviembre de 2015, en sustitución de Raimundo Viejo, y por tanto no habrá cumplido dos mandatos enteros por algo más de cuatro meses.
Metrópoli se ha dirigido al servicio de prensa de Barcelona en Comú para pedir información sobre si Badia se encuentra en la misma situación que Sanz y Pérez, si se ha tomado alguna decisión, cómo se procederá y si existe un calendario para hacer el proceso de validación. Fuentes del partido se han limitado a explicar que la coordinadora de Barcelona en Comú todavía tiene que iniciar los debates de los procesos reglamentarios y criterios para la confección de listas. El límite de dos mandatos afecta también a cargos gerenciales y de libre designación, y si repiten deberían pasar el mismo proceso que los electos.
SANZ, REGIDORA DESDE 2011, INVESTIGADA POR LA JUSTICIA
Sanz es miembro de ICV y es regidora en el Ayuntamiento de Barcelona desde 2011. Entre ese año y 2015 estuvo en la oposición mientras en la ciudad gobernaba Trias. En 2015 fue la número cinco de la lista de los comunes y en 2019 la tres. Actualmente, es la teniente de alcaldía de Ecología Urbana, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad. Sanz está siendo investigada por los presuntos delitos de "prevaricación, omisión de la obligación de perseguir delitos y obstrucción a la justicia", según el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) por el caso de la Casa Buenos Aires de Vallvidrera, que fue expropiada por el Ayuntamiento para evitar que se construyera un hotel de lujo.
Pérez es regidora desde 2015. Vinculada a Podemos, fue la número nueve en la lista encabezada por Colau. En 2019, subió hasta el puesto número cuatro. En este mandato es la teniente de alcaldía de Derechos Sociales, Justicia Global, Feminismos y LGTBI.
SANZ Y BADIA, INVESTIGADOS POR LA JUSTICIA
Badia, por su parte, entró como concejal con el mandato de 2015 ya comenzado. Tras las elecciones se quedó a las puertas de ser edil. Iba en el puesto 12 y los comunes sacaron 11 representantes. Cuatro años después, en 2019, fue en el número siete. Es el concejal de Gràcia y de Transición Ecológica y Emergencia Climática.
Esta misma semana ha trascendido que una comunidad de vecinos de Gràcia lleva a Badia a los tribunales. El concejal tendrá que declarar en calidad de investigado por los presuntos delitos de malversación y prevaricación. Los residentes le acusan de haber cedido a dedo, de forma presuntamente ilegal, un local que había estado okupado a una entidad juvenil con numerosas quejas de convivencia.
También preside la incineradora Tersa, empresa pública sobre la que el juzgado de Instrucción número 5 de Badalona ha admitido a trámite la querella que interpuso la Fiscalía a finales de marzo de este año. El magistrado ha decidido abrir una causa después de la denuncia del fiscal por la presunta comisión de un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente a raíz del funcionamiento de la planta gestionada por Tersa.