Josep Bou no será el alcaldable del PP en Barcelona. El presidente del grupo municipal anunció este martes que cerraba la puerta a ser el candidato popular. "Renuncio y descarto al PP, no quiero ser una piedra en el camino", dijo. Lo hizo después de que el partido ya no contara con él para repetir como cabeza de lista en mayo de 2023.
Este miércoles, Bou ha comparecido ante la prensa para "descargarse" de "una mochila de piedras" y decir públicamente que los populares catalanes no cuentan con él. "Ha sido imposible el diálogo con Urgell", ha subrayado en referencia a la calle en la que se encuentra la sede del PP en Cataluña.
EL PP YA NO LE QUERÍA EN 2019, DICE BOU
De hecho, ha asegurado que desde "el día siguiente de las elecciones de mayo de 2019 vi que no me querían". El concejal ha acusado al PP de Cataluña de "montar un circo mediático con él" y de hacerle quedar mal en actos. A modo de ejemplo, ha explicado que en un acto de las elecciones al Parlament "pusieron una silla con un mi nombre y no me citaron. Isabel Díaz Ayuso se dio cuenta de lo que pasaba".
También ha asegurado que el PP divulgó que tenía cuentas en Andorra, algo que que es "falso", que los populares no publicitaban su trabajo en las cuentas oficiales del partido en las redes sociales y que ha tenido muchas dificultades para acceder a los distritos. "He estado casi cuatro años trabajando y casi no he sacado nada". Y ha recalcado que los cambios de personal y cargos que hizo en el grupo municipal no le han salido gratis.
"NO LLAMÉ A NINGUNA PUERTA"
En la convocatoria, Bou ha recordado que él no fue a buscar al PP sino que fue al revés, para encabezar la lista del partido en los comicios municipales de 2019. "No llamé a ninguna puerta. No soy un arribista ni un aprovechado. Di un paso a la política porque creí que era mi deber. Hubiera hecho lo mismo si me hubiera llamado Vox y Ciutadanos. Un partido político es una herramienta".
La intención de Bou es continuar como presidente del PP en el Ayuntamiento hasta las próximas elecciones "y cumplir con el mandato de mis electores; estoy legitimado por más de 37.000 votantes". Y ha asegurado que su intención no es romper el grupo municipal, formado por él mismo y Óscar Ramírez, lo que comportaría que ambos pasarían a ser ediles no adscritos. Las relaciones entre Bou y Ramírez, que es miembro de la nueva ejecutiva nacional de Alberto Núñez Feijóo, son distantes. "Óscar es mi portavoz y yo soy su presidente, y tiene que saberlo", ha subrayado.
Sobre su futuro político, Bou ha reiterado lo que ya dijo en una entrevista con Metrópoli el pasado abril. "No llamaré a ninguna puerta, pero si algún partido me viene a buscar hablaremos, y diré que sí o no. No me cierro a ninguna opción. Estoy aquí por la convivencia entre catalanes. Estoy con todos los partidos constitucionalistas. No puedo compartir la división entre catalanes. "Lo que si seguiré siendo es empresario y miembro de entidades de la sociedad civil". Metrópoli ha hablado con Valents, Ciutadans y Vox y ninguna de estas formaciones tiene previsto incorporar a Bou.
Bou fue colocado a dedo por Pablo Casado. Con la salida de éste de la presidencia del PP y la llegada de Núñez Feijóo, todo el panorama cambió para Bou, y más con el presidente del PP de Cataluña, Alejandro Fernández, como miembro de la nueva ejecutiva nacional, con el que mantiene también una relación complicada. Sobre la afectación que la marcha de Casado podía tener en su futuro, Bou se expresaba así en abril: "Tengo un poder moral importante, que me lo dieron 37.000 barceloneses. Yo estaba puesto a dedo y ahora ya no lo estoy. Ahora estoy puesto por la democracia, por los barceloneses que me pusieron allí. Esa es una posición que tengo clara".
EL INCENDIO DEL COCHE, UN PUNTO DE CONFLICTO
Las fuentes del PP consultadas por este medio, con mucha capacidad de decisión dentro del partido, explican que la gota que habría colmado el vaso entre el partido y Bou, tanto en Madrid como en Barcelona, fue la reacción del concejal al incendio de su coche. Bou dijo que el fuego fue provocado, una versión que tanto la Guardia Urbana y los Mossos d'Esquadra desmintieron. La policía autonómica aseguró a este medio que el siniestro fue "accidental". Bou puso en duda la versión policial y denunció los hechos ante la Fiscalía.
Tampoco gustaron las declaraciones que Bou hizo alabando a ERC. El presidente del PP en el Ayuntamiento opinó que Ernest Maragall hubiera sido mejor alcalde que Colau, por ejemplo en ámbitos como la movilidad, la economía y las políticas sociales. Bou añadió que ERC "había cambiado" y que había que hacer camino con los republicanos porque ahora están más por el entendimiento.
El candidato del PP para Barcelona no se conocerá hasta después del verano. La decisión, al igual que la del resto de capitales de provincia de toda España, la tomará un comité electoral formado por seis personas. Una de ellas es la exregidora del PP en la capital catalana, Ángeles Esteller. Fue edil entre 2003 y 2018, con Alberto Fernández Díaz de jefe de filas.
EL PP IRÁ CON SUS SIGLAS A LAS ELECCIONES
Los populares, además, tienen intención de concurrir a las municipales con sus siglas. "El PP irá con sus siglas a las elecciones de Barcelona. Eso está más que asegurado y garantizado. Y será así en toda España. Otra cosa es que haya personas que se incorporen al proyecto del PP. Hemos demostrado que siempre hemos sido muy generosos y en nuestras filas hemos incorporado candidatos que venían de diferentes formaciones e ideologías", aseguró el otro concejal popular en Barcelona, Óscar Ramírez.
Entre las personas que suenan para encabezar la lista de los populares por Barcelona está la exministra de Sanidad Dolors Montserrat, como explicó Metrópoli en noviembre. Sin embargo, a Montserrat no le apetece. Quiere seguir como eurodiputada en Bruselas