Trias da la espalda a los restauradores: vota en contra de la nueva tasa de terrazas

Las ordenanzas fiscales de Collboni han topado con el bloqueo por parte de la oposición en Barcelona, incluidos los tributos relativos a las terrazas. El pleno municipal ha expresado un voto contrario unánime, con el único posicionamiento favorable a los impuestos correspondientes a los restauradores por parte del PP y Vox.

La formación de Trias ha realizado un movimiento de última hora que ha dado la espalda a los restauradores, después de que este jueves se produjera un acercamiento entre ambos partidos para dar luz verde a este punto a raíz del acuerdo entre el gobierno municipal y el Gremi de Restauració.

El teniente de alcalde de Economía, Jordi Valls, ha defendido la ordenanza de terrazas para "superar la excepcionalidad" de la pandemia, y ha recordado que esta medida "no afecta únicamente a las terrazas con más turismo, sino que afecta a familias que tienen bares con dos o tres mesas". Ramon Tremosa, regidor de Junts, ha justificado el voto contrario en la falta de negociación, y ha añadido que "el PSC ha hecho un acuerdo con el Gremi, pero no ha pactado con ningún grupo municipal".

FALTA DE ACUERDO

Las formaciones de la oposición han reprochado a Collboni la falta de acuerdo para articular estas ordenanzas. Desde Barcelona en Comú, Jordi Martí Grau ha insistido en la falta de voluntad para materializar una "mayoría amplia de izquierdas", mientras que Ernest Maragall, edil republicano, ha señalado que el PSC tan solo ha contado con "socios ilustres como el PP, Vox y el Gremi de Restauració".

Ángeles Esteller, concejal del PP, ha tachado las tasas de "continuistas", y ha lamentado que esta cuestión solo haya desatado un "fuego cruzado entre el gobierno, Junts y BComú". De Oro-Pulido ha criticado que no se hayan tenido en cuenta las peticiones de Vox, entre las que se encuentran la reducción de la "plusvalía" y las "ayudas a familias numerosas".

RESPONSABILIDAD

Tras las intervenciones de los grupos de la oposición, Valls ha señalado que el voto contrario de Junts y BComú responde a la presión de estas dos fuerzas para "formar parte de la gobernanza de la ciudad". El regidor ha reclamado "responsabilidad en beneficio de la ciudad", y ha anunciado diálogo con los partidos para alcanzar un acuerdo antes de que finalice el año.