Ernest Maragall abandonará el Ayuntamiento de Barcelona en pocos días, dejando el relevo a Elisenda Alamany, que dirigirá, por ahora, el grupo municipal de ERC. Rosa Suriñach, la siguiente en la lista de Esquerra, entrará en el consistorio como concejal. Antes de que se materialice esta decisión, ha explicado en una entrevista a RAC1 los retos a los que se enfrenta la ciudad que, según sus palabras, "se está fragmentando". Maragall no ha querido, sin embargo, pronunciarse con claridad sobre quién debe sustituirle al frente de ERC en Barcelona, dejando esa decisión en manos de la federación del partido en Barcelona y a la dirección nacional de ERC. Sobre Alamany ha señalado que "es uno de los nombres que está sobre la mesa".
El edil de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) asegura que el centro de la capital catalana está en grave riesgo de perder su personalidad. El problema lo detecta, principalmente, en el Eixample y Ciutat Vella, dos distritos que se están degradando por "falta de decisiones políticas". A ojos del líder republicano, esta situación "es un pecado que los barceloneses no nos perdonarán".
También ha hecho referencia a la mala gestión de la distribución de la riqueza y la pérdida generalizada de cohesión social.
LAS BARCELONAS QUE 'SALVAN LA CIUDAD'
Preguntado por lo mejor de la ciudad, Maragall asegura que "Barcelona ha sido capaz de hacer muchas otras barcelonas", haciendo referencia a barrios como Sants, Sarrià o el Poblenou, zonas que "están salvando la capital catalana". Para el que fue candidato a la alcaldía de ERC, la ciudad se encuentra ante una nueva época de regeneración, algo que supone nuevos retos y realidades a las que hacer frente.
El edil republicano anunció su decisión de dejar el Ayuntamiento por sorpresa durante una intervención en sesión plenaria. "Esta es mi última intervención política en este pleno. Les comunico que el próximo pleno será el último que participaré desde mi escaño", explicaba.
MARAGALL SE DESPIDE DE BARCELONA A LOS 80 AÑOS
Maragall se despide, a sus 80 años, del Ayuntamiento de Barcelona, que lo ha acompañado a lo largo de toda su trayectoria política. En 2019 ganó las elecciones municipales, pero tras el pacto de Colau con Valls, no pudo ser alcalde. En mayo de este 2023, perdió la mitad de sus concejales. Su despedida del consistorio municipal podría tener consecuencias directas en una posible negociación con Collboni y Colau para la formación del gobierno municipal.