Collboni perfila el gobierno de Barcelona con ERC con los presupuestos ya aprobados

Moción de confianza y presupuestos aprobados. El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, se vio en esa tesitura tras la negativa tanto de Junts per Catalunya como de los comunes a un acuerdo sobre las cuentas de 2024. Desde este martes 2 de mayo, Collboni ya puede disponer de ese presupuesto, después de que la oposición no pudiera presentar ninguna alternativa. Pero ahora Collboni está dispuesto a incorporar a un socio de gobierno, con preferencia por Esquerra Republicana, que negoció y aprobó con el PSC las cuentas de este año. Es la estrategia de Collboni, que corre en paralelo a la de Salvador Illa. Los dos están dispuestos a contar con socios distintos. Mientras Collboni lo hace con ERC, Illa ha abierto la posibilidad de colaborar con JxCat si gana las elecciones del 12 de mayo.

¿Una contradicción? Los socialistas entienden que pueden buscar socios distintos, porque las características de las dos administraciones también son diferentes. Collboni encontró en Barcelona la puerta abierta de Esquerra, que tras la dimisión de su alcaldable, Ernest Maragall, se mostró más favorable a un acuerdo con el PSC, de la mano de su actual líder municipal, Elisenda Alamany. El alcalde lo corroboró este mismo martes, al dar cuenta de la aprobación automática de los presupuestos –ha transcurrido un mes desde la presentación de la moción de confianza que presentó—con la idea de que debe corresponder al apoyo recibido. Al recordar que ERC pactó los presupuestos de 2024, Collboni señala que hay “un espacio compartido”.

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni EFE - ALEJANDRO GARCÍA

El PSC en Barcelona se encontró, en los últimos meses con una situación a priori no esperada. En muchas decisiones, en los consejos de distrito, en los segundos niveles de la administración local, las posiciones con ERC eran similares. Eso abrió la puerta a una posibilidad: cerrar un pacto con los republicanos y buscar, después, pactos concretos a izquierda y derecha, con comunes y con JxCat. Sin embargo, estas dos fuerzas políticas se negaron a secundar los presupuestos. Una vez aprobados, a través de la moción de confianza, Collboni considera que esa fórmula no tiene por qué descartarse, y la intentará, en función de lo que ocurra en las elecciones al Parlament de Catalunya el 12 de mayo, en las que Salvador Illa aparece en primer lugar en todas las encuestas que se han publicado.

¿Acuerdos sin Puigdemont?

Y ahí es cuando se abre el abanico. Collboni, consciente de ello, señaló este martes en una entrevista en Catalunya Ràdio, que no dejará de lado a JxCat, la formación que tuvo en Xavier Trias su candidato a la alcaldía. “Yo defiendo gobiernos progresistas, pero también somos una fuerza política de acuerdo amplio, y también hemos llegado a pactos con Junts. Veremos cómo evoluciona”, señaló.

El concejal de Junts per Catalunya en el Ayuntamiento de Barcelona, Xavier Trias EFE - ALEJANDRO GARCÍA

En el Parlament de Catalunya está en juego otra cuestión. Se trata de “pasar página”, como insiste Salvador Illa, en referencia al proceso independentista que ha protagonizado la vida política y social en los últimos diez años en Catalunya. Illa abre la puerta a un posible acuerdo con Junts per Catalunya, que, si no gana las elecciones, podría perder a Carles Puigdemont como gran referencia. El mismo Puigdemont ha afirmado que no se quedará como diputado en la oposición si no puede ser presidente de la Generalitat. En ese caso, los socialistas podrían iniciar una nueva etapa con los post-convergentes, que han recuperado la estética de Convergència Democràtica, con los carteles electorales de color azul.

Pactar en distintas direcciones

La estrategia del PSC en los últimos años ha sido la de lograr parcelas de poder allí donde podía obtenerlas. Y ha sellado pactos con Junts en distintos municipios, y también en ERC, con quien gobierna en la Diputación de Barcelona. Esa posibilidad ahora –recuperada después de años en la marginalidad política, acosados por el independentismo—ofrece a los socialistas un campo abierto: con ERC, Junts o con comunes, o con distintas combinaciones.

¿Poner todos los huevos en el mismo cesto? Es lo que no parece querer el PSC. Collboni diseña su gobierno municipal en Barcelona con los republicanos, mientras Salvador Illa explorará distintas opciones si queda primero en las elecciones del 12 de mayo. Este mismo martes, Illa precisó que todo dependerá de lo que quiera hacer JxCat, pero que él no rechazará su apoyo de cara a formar un “gobierno estable”.