Ada Colau esconde los problemas de tráfico en el Barómetro municipal. Si en la encuesta de diciembre, la circulación era el segundo problema para un 9,4% de los barceloneses, ahora esta preocupación se ha desdibujado en el Barómetro de junio. El temor era en toda regla un toque de atención al urbanismo táctico.
Cierto es que el Ayuntamiento de Barcelona, a través del concejal Jordi Martí Grau, ya había advertido de que iba a cambiar la metodología para preguntar sobre circulación. Ahora las cuestiones sobre este ámbito se han fragmentado y quedan relegadas a posiciones más bajas en la lista de los problemas más graves.
BICICLETAS Y PATINETES
Por primera vez, el consistorio pregunta a los ciudadanos por la congestión del tráfico, un aspecto que preocupa al 3,4% de los encuestados. También entran por primera vez en el Barómetro preguntas sobre la circulación de bicicletas y patinetes, que teme un 3,3%, la gestión y organización del tráfico, que un 2,4% ve como un problema grave, y el exceso de vehículos privados. Este punto es una preocupación para el 1,4% de la población.
En junio de 2019, la circulación inquietaba al 3,9% de la población de Barcelona. En diciembre de ese año, el porcentaje descendió hasta el 3,2%. El pasado verano, la preocupación subió hasta el 5,6%, y en diciembre de 2020 se disparó hasta el 9,4%.