El estreno de las obras de vía Laietana en un día laborable se ha saldado este lunes por la mañana sin problemas de tráfico. La vía, en la que se ejecutan trabajos de pacificación que se prolongarán unos dos años, cerró este domingo la circulación de subida, desde la plaza de Antoni Maura hasta Urquinaona.
Entre las 9.00 y las 10.00 de la mañana del lunes 11 de abril, la circulación de subida y de bajada por vía Laietana era fluida. Tampoco en el paseo de Isabell II, ni en dirección hacia la estación de França o el monumento a Colón, había retenciones. Cierto es que se trata de un día de Semana Santa, con ciudadanos de vacaciones y los niños sin colegios. El día 19, con la vuelta a la normalidad, será el momento de examinar de nuevo el corte y ver si tiene efectos en la movilidad de otras calles.
UN CARRIL DE SUBIDA DESDE CORREOS
En el rato que Metrópoli ha recorrido vía Laietana de mar a montaña no había rastro de la Guardia Urbana. A la altura de Correos, un carril permite a los vehículos subir hasta la plaza de Antoni Maura, mientras que de bajada hay dos carriles de circulación. En ninguno de los dos sentidos había atascos.
A la altura de la plaza de Antoni Maura, la circulación en sentido montaña queda cortada. Los operarios trabajan en la acera del lado Llobregat, lo que hace que entre Urquinaona y Antoni Maura funcionen únicamente dos carriles de tráfico en sentido descendente junto a la acera del lado Llobregat. En la salida del metro de Urquinaona, a la altura de la calle de les Jonqueres, el acceso a la citada calle se ha cerrado con vallas y permanece vetada a la circulación.
El coste total de la transformación de vía Laietana, que acumula unos 13 años de retraso, ascenderá a cerca de 32,9 millones de euros. El primer tramo, entre Urquinaona y Antoni Maura, asciende a 16,8 millones de euros, mientras que el segundo, desde Antoni Maura hasta Correos, junto al paseo de Colom, tiene previsto una inversión de 16,1 millones.
32,9 MILLONES DE PRESUPUESTO
Una vez finalizadas las obras, la propuesta pactada permitirá a los vehículos privados bajar por vía Laietana a 30 kilómetros por hora. El carril estará situado en el centro, junto al que se habilitará para el transporte público y las bicicletas, también en sentido descendente. De subida, se vetará la circulación al vehículo privado. Solo los vecinos podrán usar el carril bus-taxi existente, así como aquellos ciudadanos que vayan a comprar por la zona –por ejemplo al mercado de Santa Caterina– y quieran hacer uso de los aparcamientos subterráneos.
La reforma prevé que, de bajada, los ciclistas compartan el carril con buses y taxis. De subida, el carril para las bicis será exclusivo y pegado a la acera, pero tendrá el problema de que los vehículos de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) podrán invadir la vía ciclista en las paradas. La solución planteada por el Ayuntamiento no gusta a los usuarios de la bici.
DESAPARICIÓN DE LA ROTONDA DE LA PLAZA DE ANTONI MAURA
La propuesta urbanística incorpora también cuatro grandes zonas, que corresponden a las cuatro grandes plazas de vía Laietana, donde se facilitará la conexión con los peatones. Uno de los cambios principales será la desaparición de la rotonda de Antoni Maura, a la altura del mercado de Santa Caterina y de la Catedral de Barcelona. En su lugar se construirá una gran plaza. También se renovará la plaza de Idrissa Diallo, junto al edificio de Correos, en la parte baja de vía Laietana.
Una de los aspectos más positivos que tiene la reforma de vía Laietana es la eliminación del carril peatonal pintado en calzada por el Ayuntamiento. Se trata de una de las mayores aberraciones del urbanismo táctico de Ada Colau. El carril apenas era utilizado por los peatones -era un peligro- y era usado diariamente por ciclistas y usuarios de patinetes. En distintas ocasiones se habían producido atropellos, explicó el presidente de la asociación de vecinos y comerciantes de vía Laietana, David González.
CONTENCIOSO CONTRA LA REFORMA
La patronal Foment del Treball y la asociación de comerciantes Barcelona Oberta, una de las más grandes de la ciudad, han presentado un contencioso administrativo ante el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya en la que piden paralizar de forma cautelar las obras de vía Laietana.