La Superilla del Eixample, a punto de expulsar a los coches del centro de Barcelona. El próximo viernes, 18 de noviembre, empezará a limitar a los vehículos para dar más prioridad a los peatones en los cuatro primeros ejes verdes que se están construyendo.
En concreto, las primeras afectaciones a los vehículos se darán en la calle de Consell de Cent, de Rocafort, de Girona y de Comte Borrell.
INFORMARSE ANTES
El gerente de Movilidad e Infraestructuras del consistorio, Manuel Valdés, ha recomendado a los conductores que "se informen sobre el mejor recorrido para llegar a su destino" y que "salgan con antelación".
Según Valdés, el consistorio ya prevé que durante las primeras semanas tras los cambios puede haber "desconocimiento" por parte de los conductores.
NUEVO GIRO OBLIGATORIO
Con las nuevas normas de la superilla todos los coches tendrán que girar en cada esquina, sin poder acceder al tramo siguiente. Así, el acceso a cada eje transversal implicará la salida por la siguiente vía transversal.
Estas primeras órdenes se mantendrán cuando las obras terminen. Entonces, también se aplicará la obligación de respetar un límite máximo de velocidad de 10 kilómetros por hora.
BICICLETAS Y TRANSPORTE PÚBLICO
Las normas no afectan a bicicletas, transporte público ni vehículos de servicios o emergencias, que podrán seguir circulando en línea recta.
Además, Valdés señala que será posible acceder a los vados y aparcamientos en todo momento.
GIRO NO OBLIGATORIO
Hay algunos puntos en los que los vehículos no estarán obligados a girar: calle de Consell de Cent con calle de Aribau, Consell de Cent con el paseo de Gràcia y los cuatro cruces que rodean la futura plaza de Consell de Cent con la calle de Girona –Bruc con Consell de Cent, calle de Bailén con Consell de Cent, calle de Aragó con Girona y calle de Diputació con Girona–.
ATRAVESAR EL EIXAMPLE
El giro que más afectará a la circulación es el de la calle de Consell de Cent, ya que ya no se podrá atravesar el Eixample de oeste a este.
En esta vía, donde antes circulaban unos 9.000 vehículos y ahora lo hacen unos 7.000, se espera que el paso de los coches disminuya todavía más a partir del 18 de noviembre.
VALLAS MÓVILES
Para obligar a girar en los cruces implicados, se instalarán vallas móviles de malla que indicarán la dirección correcta. Así lo ha informado Paco Alcañiz, director general adjunto de BIMSA.
La teniente de alcaldía de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad, Janet Sanz, dijo en junio que los cambios de movilidad se pondrían en marcha nada más empezar las obras de la superilla, que empezaron en agosto. No obstante, el gerente de Movilidad e Infraestructuras ha justificado la espera hasta el 18 de noviembre porque "hasta ahora no se necesitaban para poder ejecutar las obras".