La lectura puede ser uno de los principales entretenimientos mientras dure el confinamiento provocado por el decreto del estado de alarma. La variedad de títulos y géneros a escoger permite encontrar textos para todos los gustos que pueden tener su utilidad en diferentes ámbitos y disciplinas.

Por ello, y ante la orden de cierre de establecimientos, algunas librerías de Barcelona han optado por repartir a domicilio las lecturas y, así, hacer más llevadera la situación.

CASA DEL LIBRO

La Casa del Libro es una de las empresas dedicadas al sector que continúan con su labor pese a haber cerrado las puertas de sus establecimientos físicos de toda España, entre los que se encuentran los de la capital catalana y su área metropolitana.

Así, desde la publicación del decreto la compañía ofrece a los lectores envíos a domicilio, que se realizarán de forma gratuita sin necesidad de hacer una compra mínima.

LA CENTRAL

Las librerías de La Central, cuyo local más emblemático se encuentra en el barrio de El Raval, también han optado por seguir con su actividad adaptándose a la actualidad.

La empresa ha habilitado la compra online con "servicios mínimos" para cumplir con las recomendaciones sanitarias oficiales, por lo que será posible la adquisición de títulos pero con un tiempo de espera variable en función de la demanda.

ON THE ROAD

Desde Ciutat Vella, la librería On The Road se ha sumando al delivery de libros ante la crisis del coronavirus. Y es que el establecimiento ha asegurado el reparto de los títulos, un trabajo que se hará desde el propio local y en bicicleta.

La librería hace también un llamamiento para que aquellos que quieran obtener un libro no duden en ponerse en contacto ya que, aseguran, "en estos momentos las librerías pequeñas y de barrio" necesitan a sus clientes más que nunca.

LA CARBONERA

A escasos metros de la avenida Paral·lel se encuentra La Carbonera, una librería de referencia en el Poble-sec. Con sus puertas ya cerradas por la pandemia, también realizan sus encargos a domicilio utilizando sus propios medios.

Mediante un contacto de correo electrónico indicando el pedido, una dirección y un teléfono, la librería se encarga del reparto de libros.

ACTIVIDADES NO PRESENCIALES

Entre las librerías que han optado por el cierre total y la cancelación de sus servicios, algunas han apostado por continuar ofreciendo otras posibilidades.

Buen ejemplo de ello es No Llegiu, una librería de El Clot que ha comunicado la cancelación absoluta de su actividad comercial pero que ha anunciado que, durante este periodo, organizará actividades no presenciales para amenizar el confinamiento de los lectores.

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