Roger Pallarols, director general del Gremi de Restauració, critica la gestión de la Generalitat en la crisis del coronavirus y lamenta que se atribuya el incremento de contagios a la reapertura de los bares y restaurantes de Barcelona y su área metropolitana.
“El Govern es incapaz de abordar la crisis económica con la misma intensidad que la crisis sanitaria. Están agravando la crisis de sectores económicos claves para la ciudad y lo pagaremos durante una década. Tardaremos mucho en levantar cabeza”, ha comentado Pallarols a Metrópoli Abierta.
LA CAMPAÑA DE NAVIDAD
El director del Gremi de Restauració está molesto con las acusaciones que señalan a bares y restaurantes como los responsables directos del aumento de los contagios. “No es creíble que se nos acuse de la actual situación sanitaria una semana después de la reapertura de nuestros negocios. Tres semanas después del último cierre, los contagios seguían creciendo en Barcelona”, desliza Pallarols.
Barcelona no cambiará de fase el lunes. Las limitaciones de aforo del 30 % en el interior de bares y restaurantes se mantendrá, con el perjuicio económico para el sector. “Encaramos la campaña de Navidad en el peor escenario. La situación del sector es crítica. Estamos al límite”, insiste Pallarols.
EL RELATO DEL GOVERN
El director del Gremi apela a los datos del Ministerio de Sanidad para rebatir las críticas a la restauración. Según el Gobierno español, solo el 3,5% de los contagios se producen en bares y restaurantes. “El problema lo tenemos en el ámbito personal, pero el Govern cambia el relato en función de sus intereses”, añade.
Pallarols vislumbra un recuperación muy lenta y, sobre todo, está preocupado por la falta de diálogo con el Govern. En cambio, agradece la respuesta de los barceloneses tras la reapertura de los negocios de la restauración, "casi siempre con muchas precauciones y sentido común".
MESES MUY DUROS
En una entrevista concedida a Metrópoli Abierta hace un mes, Pallarols ya avisó de que el 30% de los bares y restaurantes cerrarían en Barcelona en los próximos meses por los efectos del coronavirus y la mala gestión de las administraciones.
Los últimos meses han sido muy duros para los restauradores. Han sido meses con muchos altibajos. Primero lograron una rebaja de las tasas de las terrazas en una dura negociación con el Ayuntamiento de Barcelona. Después lograron una rebaja de los alquileres. Sin embargo, el último cierre ha tenido un impacto muy negativo en los bares y restaurantes de toda Cataluña.