Fotomontaje de Ernest Maragall, candidato a la alcaldía de Barcelona de ERC / METRÓPOLI

Fotomontaje de Ernest Maragall, candidato a la alcaldía de Barcelona de ERC / METRÓPOLI

¿Quién hace Barcelona?

Ernest Maragall

4 marzo, 2023 00:00

Noticias relacionadas

Ernest Maragall no sabe que todo manifiesto firmado por más de tres personas resulta siempre un ejemplo más del mismo tema idiota. Su fiasco con el manifiesto de personalidades a su candidatura como alcalde demuestra, una vez más, su analfabetismo del alma. Toda su carrera (si se le puede llamar así) la hizo gracias a su hermano Pasqual, al que no dudó en utilizar cuando ya estaba seriamente enfermo. Conocido como el Tete en su propia saga familiar, siempre fue objeto de risas y bromas por sus pocas luces. Y cuando se cuenta lo que le costó Dios y ayuda y lo que hubo que hacer para que lograse aprobar unas oposiciones a funcionario del Ayuntamiento, los funcionarios de verdad aún se avergüenzan de aquella conjura de los muy necios.

Luego pasa lo que ha pasado. El Tete presenta un manifiesto de apoyo y cuatro presuntos firmantes se borran y salen huyendo rápidamente de una lista que parece el camarote de los hermanos Marx. En ella se amontonan, sin ton ni son, socialistas de antes y de ahora junto a independientes y republicanos presuntamente “maragallianos”, pero de Pasqual. Por si fuese poco el ridículo causado, que su partido y su equipo han llamado “confusión”, se le ha añadido un consejo de “sabios” formado por un músico, una arquitecta, una directora de un chiringo de ciencia y tecnología, una presidenta de una fundación, un ex directivo del Liceu y del Grupo Godó y ex socialistas que abandonaron el partido pero no siguieron los pasos poco esforzados y bien remunerados del Maragall saltimbanqui. Esta nueva agrupación de saldos políticos desteñidos recuerda que, como dijo alguien, el bobo, para ser perfecto, necesita ser algo culto. Pero ni eso.