Aprende a segmentar tu lista de mails y descubre el potencial del mailing para incrementar tus ventas

La segmentación en email marketing es una de las cuestiones más primordiales que cualquier emprendedor debe trabajar para sacar verdadero partido a sus campañas corporativas de mailing. Cada vez vemos cómo las marcas se esfuerzan por ofrecer a sus usuarios un contenido más personalizado y relevante a través del correo electrónico, con recomendaciones individuales que propician la construcción de relaciones significativas con la audiencia. 

Para esto, la segmentación de las listas de suscriptores funciona como una de las bases estratégicas del mailing, como una manera de optimizar esfuerzos y dar a los suscriptores un contenido con el que realmente les resulte atractivo interactuar. Para desarrollar toda esta estrategia es necesario contar también con una herramienta de gestión y envío de correos electrónicos masivos que sean confiable y cuente con décadas de experiencia en el sector. 

En este sentido, Mailrelay se ha posicionado en los últimos años como la plataforma estrella para segmentar listas y crear campañas de email marketing desde cero, gracias a contar con la cuenta gratuita más grande del mercado y un completo editor de correos electrónicos con capacidad IA, API de desarrollo y SMTP con estadísticas avanzadas. Además, Mailrelay también pone a disposición de sus usuarios un equipo de soporte técnico 100% atendido por expertos en email marketing en todas las cuentas, incluidas las gratuitas, lo cual lo convierte en una solución potente, fácil de usar y con excelente entregabilidad. 

¿Cómo realizar una buena segmentación de los contactos?

Antes de empezar a establecer la propia segmentación de la lista de suscriptores, lo mejor es dedicar cierto tiempo a pensar en qué términos nos gustaría dividir a la audiencia. En este sentido, habrá empresas que quieran priorizar la fidelización de sus ya clientes, otras que quieran dar a conocer un nuevo producto y otras que busquen aumentar el número de ventas generales. Tener claros estos objetivos nos dará una idea más concreta sobre qué tipos de segmentos se quieren establecer en la lista, para poder llevar a cabo una agrupación consciente y eficiente. 

Así, por ejemplo, una marca que quiera segmentar su lista para hacer una campaña de fidelización, tendrá que escoger los perfiles de usuarios con compras recurrentes o con tickets medios superiores a una cierta cantidad; mientras, por su parte, las marcas que quieran aumentar sus ventas generales, quizás tengan que dividir su lista entre suscriptores que todavía no han hecho una compra y suscriptores que han comprado una o varias veces. Todas estas ideas ayudarán, a su vez, a crear subgrupos que permiten afinar el mensaje, brindar contenidos más personalizados y, en definitiva, que aumenten las posibilidades de hacer una compra. 

Segmentación basada en el comportamiento de compra

Una vez se tengan claros cuáles son los objetivos que se quieren cumplir a partir de la segmentación de la lista de suscriptores, lo mejor es empezar a trabajar con la base de datos analizando el comportamiento de compra y navegación. Con las herramientas de analítica adecuadas, podremos estudiar los datos que los propios usuarios dejen en la web de la marca y tomar decisiones basadas en sus conductas. 

Así, por ejemplo, si un grupo de usuarios ha visitado una página de producto, pero no ha terminado de completar su compra, se pueden segmentar para enviarles únicamente a ellos una campaña de mailing que incite a finalizar este proceso. Esto puede lograrse a través de un descuento exclusivo, diseñando un recordatorio de última oportunidad o incluyendo en el mail un testimonio de compra que resulte convincente.

Segmentación según la interacción con los propios mails

Otro de los métodos más eficaces para segmentar una lista de suscriptores consiste en prestar atención a cómo los usuarios interactúan con correos electrónicos previos de la marca y diseñar campañas en función de esto. Así, se pueden analizar indicadores como la tasa de apertura, el número de clics, el tiempo de permanencia o la interacción con los botones de llamada a la acción, adaptando el contenido para dar al usuario un mensaje directo sobre lo que se espera que haga en el correo. 

De esta manera, para aquellos usuarios que valoren la lectura se pueden diseñar campañas de mailing más relacionadas con el storytelling o el contenido de valor; para los usuarios que abren los correos, pero no terminan de hacer clic se pueden crear campañas con mensajes directos, rápidos y breves, en los que se incite a hacer clic en el llamado a la acción desde el primer momento. 

Segmentación según la etapa del ciclo de vida del cliente

El último tipo de segmentación que veremos en el día de hoy es aquella que distingue a los usuarios en función de en qué fase se encuentren como clientes. Por lo general, los clientes desarrollan su relación con las marcas en cinco pasos: descubrimiento, consideración, conversión, fidelización y reactivación. Así, si puedes distinguir en qué fase está cada uno de los clientes atendiendo, por ejemplo, al tiempo que lleven suscritos a la lista o a su historial de compra, podrás diseñar contenidos más específicos y efectivos. 

De esta manera, aquellos segmentos que estén en fase de descubrimiento pueden sentirse más atraídos por contenidos educativos o guías descargables, los que estén en fase de consideración por comparativas y demostraciones de productos y quienes estén en fase de fidelización, por programas de puntos, tarjetas de recompensas o ventas privadas. 

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