El pasado año fue trágico para Barcelona en cuanto a delitos registrados se refiere. En 2019 las infracciones penales en la capital catalana fueron 122 por cada 1.000 habitantes y, sobre el total, ascendieron a 200.225. La cifra, tan elevada como alarmante, tan solo la supera el municipio de El Prat de Llobregat en el Área Metropolitana de Barcelona. Ada Colau (BeC) y Lluís Mijoler (El Prat en Comú) son los alcaldes de ambas poblaciones.
TIPOLOGÍA DE DELITOS
Los hurtos predominan en las denuncias por infracciones penales al finalizar el pasado año. Hasta 108.308 casos se produjeron en 2019, seguidos de los robos con violencia e intimidación, que ascendieron a 14.750. Los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones también fueron notorios, con 9.381 casos, así como las sustracciones de vehículos, cifradas en 4.643.
Inferior es el número de denuncias por tráfico de drogas, que se estableció en 527. En la ciudad también se cometieron 158 violaciones y 17 asesinatos. Por contra, no se registró ningún secuestro en todo el año.
EL PRAT, A LA CABEZA
Barcelona y El Prat de Llobregat tienen dos aspectos compartidos. Ambos gobiernos municipales están liderados por los comunes y son, a su vez, las ciudades que mayor número de delitos presentan. Y es que en el municipio metropolitano alcanzó un total de 168 infracciones penales por cada 1.000 habitantes, superando así a la capital catalana.
Con una población de 64.599 habitantes, la localidad barcelonesa sumó 10.862 denuncias que, además de otros delitos menores, se dividieron en 6.215 hurtos, 292 sustracciones de vehículos, 253 casos de tráfico de drogas, 172 robos con violencia e intimidación y 160 robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones.
En el municipio también se cometió una violación, un asesinato y, como en Barcelona, no se registró ningún secuestro.
CIFRAS ELEVADAS EN EL BARCELONÈS
Los municipios del Barcelonès presentan, por lo general, unos elevados valores en cuanto a denuncias por infracciones penales se refiere. Buen ejemplo de ello es Sant Adrià de Besòs, que en 2019 alcanzó los 108 delitos por cada 1.000 personas.
Similar es el caso de l'Hospitalet de Llobregat, donde los delitos sobre la misma cifra de habitantes ascendieron a 68. Badalona y Santa Coloma de Gramenet registraron 56 y 49 delitos respectivamente.
EL BAIX LLOBREGAT, DISPAR
Los municipios del Baix Llobregat más cercanos a Barcelona presentan unos datos de actividad delictiva significativamente dispares. Mientras que Esplugues de Llobregat, Castelldefels y Cornellà de Llobregat presentaron el pasado año 60, 57 y 56 infracciones penales por cada 1.000 habitantes, en los municipios de Sant Joan Despí y Sant Feliu de Llobregat tan solo se registraron 33 y 32 delitos respectivamente.
En mitad de la escala se encuentran las localidades de Gavà, Viladecans y Sant Boi de Llobregat, que finalizaron 2019 con 50, 49 y 47 delitos a los 1.000 habitantes.
DOMINIO DE LOS HURTOS
En todos los municipios metropolitanos el dominio de los hurtos es un factor común. La cifra, en todos los casos, es significativamente superior respecto al resto de delitos registrados.
En las localidades del Barcelonès, los robos con violencia e intimidación son más frecuentes que en los municipios del Baix Llobregat. Por otra parte, todos los municipios coinciden en el incremento de robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones en el tercer trimestre del año, coincidiendo con la temporada estival.