Los vecinos de Barcelona se han acostumbrado, a marchas forzadas, a convivir con okupaciones conflictivas. Las sucedidas en la plaza de Navas, en el Poble-sec, o en el solar del fallido hotel Praktik, del Raval, ejemplifican la problemática que suponen en los barrios.
Los residentes del entorno del Camp Nou también sufren okupaciones, pero una de ellas ha ido a peor con el paso del tiempo hasta convertirse en una auténtica pesadilla.
Según denuncian, los okupas que se encuentran en el número 14 de la calle de Felipe de Paz han incrementado su violencia en el barrio y atemorizado a los vecinos, mientras que la propiedad no judicializa el caso, por lo que su desalojo resulta complicado.
"TODA LA DROGA QUE QUIERAS"
La Asociación de Vecinos del Camp Nou lamenta que la okupación de este local "ha ido a mucho peor", ya que se trata de "gente violenta" que se encuentra en una propiedad en la que hay "todo el alcohol y la droga que quieras".
La actitud de estos individuos, a los que se les ha visto incluso con una "pistola" en el barrio, se recrudece cuando el Barça juega como local. "Los días de partido salen y la lían, el ambiente no es favorable. Hemos tenido problemas, hay que ir con mucho cuidado de no cruzarte con ellos", aseguran.
El colectivo vecinal apunta que, "hace mes y medio", los okupas trataron de entrar el "número 22 de la calle de Benavent" con el objetivo de acceder también a un segundo local adjunto utilizando el método del "butrón". La intervención de Mossos d'Esquadra y Guardia Urbana logró evitar la okupación y la propietaria del local, una mujer con "más de 90 años", acudió al lugar y ordenó la instalación de un "aislamiento con un coste de 1.600 euros" con el que ha evitado que los individuos vuelvan a intentar acceder.
PROPIETARIOS INMÓVILES
La asociación lamenta que los propietarios del local de Felipe de Paz no estén actuando para conseguir el desalojo. "No están haciendo nada para sacarlos porque cuesta un dinero. No viven aquí y los problemas no son para ellos", remarcan.
En este sentido, los vecinos recuerdan que, en el caso de inmuebles privados, los titulares son quienes deben actuar: "Los propietarios de los locales tienen que moverse para los desalojos".
OKUPACIÓN EN BENAVENT
Otra okupación que preocupa en La Maternitat es la que afecta al número 14 de la calle de Benavent. Los okupas se encuentran en el lugar desde hace ya cuatro años y, como afirmaron los vecinos a Metrópoli, hay "muchísima gente" en poco espacio y se realizan "trapicheos".
Desde la asociación denuncian que la problemática continúa, y que una okupa de este inmueble lo ha convertido en una especie de alojamiento en el que cobra a otras personas por pasar allí la noche.