Agentes de la Guardia Urbana han evitado la okupación del piso de un vecino en el barrio de la Barceloneta, después de que el mismo propietario diera el aviso sobre lo que estaba sucediendo en su domicilio.
Los efectivos policiales se personaron en el inmueble, en el que encontraron a tres individuos a los que les intervinieron 14 teléfonos, objetos robados y sustancias estupefacientes.
Además, los individuos contaban con las llaves de 12 viviendas ajenas para su posterior venta, según ha informado la policía barcelonesa.
EVITAR PROBLEMAS JUDICIALES
Fuentes municipales apuntan que el propietario llamó a la Guardia Urbana después de que un vecino le comentara que había escuchado ruidos en su piso. A su llegada, los agentes vieron indicios de okupación reciente.
Los efectivos de la policía barcelonesa picaron a la puerta del domicilio y, al identificarse, los individuos reconocieron la okupación de la vivienda y salieron de la misma afirmando que no querían tener problemas judiciales. Uno de los okupantes quedó detenido, y los otros dos están siendo investigados.