El Ayuntamiento de Sant Quirze del Vallès ha exigido este martes el cierre de la discoteca Waka tras la agresión sexual denunciada por una chica el pasado viernes. "Es intolerable que la Generalitat siga permitiendo una actividad donde las agresiones sexuales son reiteradas", ha expresado el consistorio.

El gobierno municipal recuerda que no tiene competencia para cerrar el local de ocio nocturno y que ha solicitado al govern que lo haga en "innumerables" ocasiones. El consistorio muestra el "apoyo incondicional" a la víctima y se ha ofrecido a acompañarla y asesorarla. En un comunicado, el consistorio recuerda que cualquier agresión sexual "atenta contra uno de los derechos humanos más fundamentales de una persona: la libertad sexual".

INVESTIGACIÓN DE LOS MOSSOS

Los Mossos d'Esquadra han abierto una investigación tras la denuncia de una clienta que aseguró que fue violada en una de las tarimas de la discoteca. "Me cogieron del cuello y acabaron violándome", explicó en las redes sociales sobre el suceso que avanzó Metrópoli.

Fotomontaje de la testigo y la víctima de la paliza en la discoteca Waka de Sabadell / METRÓPOLI

 

Las cifras que expone el consistorio reflejan el alto grado de conflictividad que se genera en este local. Según la Junta de Seguridad Local celebrada el pasado mes de mayo, la policía realizó 160 actuaciones durante 2021, se registraron 46 agresiones y se detuvo a 36 personas, 3 de las cuales por violación.  Hace cuatro meses, los Mossos detuvieron a dos jóvenes por otra presunta violación, en esta ocasión a una joven en las alrededores de la discoteca. 

PALIZAS Y DISTURBIOS

La polémica sala ha generado numerosos titulares por las agresiones de los empleados de la seguridad privada contra sus clientes. Una de las últimas palizas del personal cometida a finales de 2021 provocó una protesta y un intento de asalto por parte de decenas de jóvenes. La discoteca despidió a dos porteros tras esta última agresión.

En otra ocasión, en febrero de este año, un mosso d'esquadra resultó herido por una piedra después de una agresión entre clientes. Efectivos de los antidisturbios acudieron al local y un grupo de personas empezaron a lanzarles piedras en el aparcamiento. Pidieron refuerzos, pero cuando llegaron los atacantes ya habían huido. Pocos días antes de este suceso, la policía detuvo a un hombre por agredir sexualmente a una joven y golpear a una segunda chica en esa misma discoteca. Las dos víctimas fueron trasladadas al hospital tras el suceso. 

Noticias relacionadas