De pícnic por Barcelona: Tres rincones para dar la bienvenida al buen tiempo

Con el verano a la vuelta de la esquina, cada vez apetece más salir de casa y disfrutar del buen tiempo que reina en la ciudad. Y organizar un pícnic con la familia o amigos es la mejor excusa para hacerlo. Gracias a la cantidad de parques y zonas verdes que existen en Barcelona, llevarlo a cabo es más sencillo que nunca. 

A continuación recopilamos tres de los rincones más característicos de la capital catalana en los que disfrutar de los primeros rayos de sol de la temporada compartiéndolos con buena compañía y rodeado de bebida y alimentos. 

PARQUE DE LA CIUTADELLA

El Parque de la Ciutadella es uno de los más transitados de la ciudad. Su amplia extensión y la gran cantidad de zonas verdes que ofrece hace que se haya posicionado como el lugar perfecto para pasar un día de pícnic en familia. Especialmente los fines de semana, es en esta temporada del año cuando recibe a cientos de personas que pasan en él los días enteros.

Y es que este lugar es ideal tanto para grupos de amigos como para familias con niños pequeños, por la gran cantidad de actividades que se pueden realizar a su alrededor. 

PARQUE DEL TURÓ

En la zona más alta de la Ciudad Condal, en el barrio del Putxet, está situado el Parque del Turó. Llama la atención la cantidad de vegetación que es capaz de concentrar, posicionándose como uno de los parques más agradables para pasar un día en buena compañía al cobijo de sus innumerables árboles. 

Por su ubicación, en los días más despejados es posible disfrutar de unas impresionantes vistas de la ciudad de Barcelona, incluyendo el mar y toda la costa barcelonesa.

PARQUE DE CERVANTES

El Parque de Cervantes se encuentra situado en uno de los extremos de la Avenida Diagonal, concretamente a la altura del distrito financiero. Pese a no ser uno de los parques más grandes, sí que es uno de los más tranquilos, actuando como un 'oasis de paz y tranquilidad' en un lugar tan ajetreado como en el que se encuentra. Cuenta con una zona con pequeñas mesas y lugares para sentarse, por lo que se convierte en el lugar perfecto para pasar el fin de semana.