En la calle dels Cortada, en el cruce de Coll i Alentorn con la avenida de Martí Codolar de Horta, se dibuja la silueta de… ¿Una silla enorme? ¿una versión moderna del famoso toro de Osborne pero sin atributos? “El toro” o “la silla” son los nombres populares con los que se conoce esta escultura titulada en realidad Forma i espai. Esta obra de arte público monumental, realizada en acero por el veterano escultor vanguardista y barcelonés Eudald Serra, fue un proyecto de 1966 que el artista materializó en 1992, con motivo de los Juegos Olímpicos.
Forma i espai, formada por dos arcos de acero en forma de pórtico, daba la bienvenida a los atletas, visitantes y curiosos que asistían a las pruebas olímpicas celebradas en la zona del Vall d’Hebron, totalmente transformada para la ocasión.
OLVIDADA A DÍA DE HOY
Actualmente, parece más un animal extraviado o desubicado que una hospitalaria puerta de entrada. Rodeada de coches y solitaria, en un cruce de caminos, mira desde la distancia hacia el parque del Vall d’Hebron. Desde allí, apostada junto a la parada del autobús, como perdida en los recuerdos, parece esperar la llegada de una Barcelona que se fue. ¿Quién sabe?
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