La montaña de Montjuïc sirvió de enclave para construir parques de atracciones para los barceloneses. En toda su historia, la montaña ha albergado dos parques.
MARICEL PARK
El primero fue inaugurado el 16 de julio de 1930 y funcionó durante seis años. En 1936, y con el inicio de la Guerra Civil, desapareció. El parque se contruyó en lo que por aquél entonces era un poblado de un barrio de barracas llamado barrio Maricel, de aquí su nombre: Maricel Park.
SEGUNDO PARQUE
No fue hasta años más tarde que la montaña de Montjuïc no volvió a tener otro parque de atracciones. Ideado por el alcalde Josep Maria de Porcioles a mediados de los años 60, el parque fue uno de los proyectos de transformación de la ciudad que se impulsaron desde el consistorio franquista y que formó parte de una operación propagandística que buscaba ofrecer una imagen más moderna del régimen.
La inauguración del parque de atracciones fue un evento ciudadano de tal envergadura que su capacidad se vio limitada ante el alud de gente que acudía. En el momento de su apertura, el parque ofrecía más de 40 atracciones que se fueron renovando y sustituyendo. La oferta estaba dirigida a todos los públicos y todas las edades.
DESAPARICIÓN
En 1994 se cerró el ejercicio económico con doce millones de pesetas de pérdidas y una afluencia inferior al millón de visitantes. Un año después, en 1995, la inauguración de Port Aventura, el primer parque temático de España, supuso un golpe definitivo para el parque de atracciones de Montjuïc, que abrió sus puertas por última vez en 1998.