Los últimos días de agosto, con las temperaturas en máximos, muchos quieren aprovechar el fin de las vacaciones para visitar alguna playa escondida, a poder ser cerca de Barcelona.
Un plan ideal sería acercarse a Cala Morisca, en las costas del Garraf, en el kilómetro 169 de la carretera C31, en sentido Sitges. Sólo se puede acceder en coche o moto, pero hay un párking para estacionar el vehículo. El lugar se encuentra a media hora en coche de la capital catalana.
CHIRINGUITO Y RESTAURANTE
El lugar es mixto, medio nudista y medio textil, en medio del parque natural del Garraf y rodeado de naturaleza. Además, hay un chiriniguito y un restaurante en los que puedes pedir una deliciosa paella o un refrescante cóctel.