La impresionante ruta para disfrutar de los almendros en flor esta primavera: a 20 minutos de Barcelona

Catalunya tiene un espectáculo de la naturaleza que poco tiene que envidiar a los emblemáticos cerezos en flor japoneses. Miles de árboles se tornan en un maravilloso color blanco con tintes rosados en el principado entre finales de febrero y principios de marzo, la temporada en la que los almendros florecen, un espectáculo visual que, sin embargo, puede ser el precedente de desgracias si no sucede en el momento justo.

Y es que este preciado fruto de cáscara procede de un árbol particularmente sensible a las temperaturas. Si hay un invierno cálido, pueden adelantar su floración, pero una única granizada puede ser devastadora para los campos.

Un paseo único

Más allá de la actividad económica, siempre es romántico pasear por los campos de almendros en pareja o incluso hacer un pícnic. A solo unos 20 minutos de Barcelona, existe una ruta llena de estos árboles que se convierte en un lugar privilegiado para hacer una excursión de fin de semana.

Un almendro en flor Pexels

La ruta arranca en la localidad de La Garriga, un municipio que destaca por su largo paseo lleno de mansiones modernistas, así como por el estilo arquitectónico del casco antiguo, que va desde lo medieval hasta principios del siglo XX. 

Siguiendo el principal --y señorial-- Passeig modernista, se puede atravesar todo el pueblo hasta poner rumbo a la vecina Samalús. Por el camino, se pasa por el bosc de Malhivern, les Planes, los almendros de can Nualart, el pla de les parets, el torrent de l’Alzinagra, el serrat del Puig, la quintana de la caseta y, finalmente, can Lluc. Luego, si se desea, se puede continuar por el sot de l’ase y el turó de can Violi.