El Born esconde unas esculturas de la Edad Media que tenían una curiosa función: cabezas de mujer

¿Sabías que el Born tiene unas esculturas de la Edad Media que tenían una función muy curiosa? Son unas cabezas de mujer que servían como marcadores discretos de burdeles en la ciudad.

La presencia de la prostitución en el casco antiguo de Barcelona se ha reconocido desde hace tiempo como un aspecto integral de la vida medieval. La proximidad con el puerto propició el florecimiento de esta práctica, siendo aprovechada por marineros, comerciantes y otros profesionales. Estas esculturas recién descubiertas proporcionan una visión única de cómo se organizaba discretamente esta actividad en la Barcelona medieval.

Prostitución en la antigua Barcelona

Las cabezas de mujer, talladas con detalle en piedra, presentan una variedad de expresiones y adornos típicos de la época. Más allá de su apariencia artística, estas esculturas funcionaban como señales codificadas, indicando la presencia de establecimientos donde se ofrecían servicios sexuales. Su ubicación estratégica en las calles del Born sugiere una cuidadosa planificación urbana para organizar discretamente la actividad comercial relacionada con la prostitución.

Una de las esculturas del Born GALA ESPÍN

El hallazgo ha suscitado un renovado interés entre los estudiosos de la historia y la arqueología, quienes lo consideran un testimonio valioso de la vida cotidiana en la Barcelona medieval. Sin embargo, el significado exacto de estas esculturas sigue siendo objeto de debate. Algunos expertos sugieren que podrían haber tenido una función más amplia, como marcadores de lugares de entretenimiento o simplemente elementos decorativos.

A medida que los estudiosos continúan analizando y debatiendo su significado, estas obras de arte antiguo continúan cautivando la imaginación y proporcionando nuevas perspectivas sobre la historia de Barcelona.