Los nódulos tiroideos, que son crecimientos anormales en la glándula tiroides, afectan a una parte significativa de la población. Esta pequeña glándula en forma de mariposa, situada en la base del cuello, desempeña un papel fundamental en la regulación del metabolismo y la función de órganos vitales.
Aunque estos nódulos pueden ser benignos o malignos, se estima que entre el 3% y el 10% de la población los desarrolla, aunque algunos estudios indican que esta cifra podría alcanzar hasta el 60% cuando se detectan mediante técnicas de imagen como la ecografía.
Aproximadamente uno de cada cinco casos de nódulos tiroideos benignos crece lo suficiente como para causar síntomas como dolor, dificultad para tragar, o tos, lo que puede llevar a la necesidad de tratamiento. En respuesta a esta necesidad, uno de los enfoques terapéuticos más innovadores y menos invasivos es la ablación por radiofrecuencia. Este procedimiento permite reducir el tamaño del nódulo sin necesidad de cirugía, lo que mejora considerablemente la experiencia del paciente, afirma el doctor Jordi Reverter, especialista en Endocrinología del Hospital Quirónsalud Badalona.
Ablación por radiofrecuencia
La ablación percutánea por radiofrecuencia utiliza calor intenso, generado por una sonda insertada en el nódulo a través de una aguja especializada, para vaporizar el tejido del nódulo. Este tratamiento, realizado en una sala de radiología intervencionista, detiene el crecimiento del nódulo y reduce su tamaño en un 60-80% dentro del primer año, aliviando los síntomas asociados.
El procedimiento es ambulatorio, lo que significa que no requiere hospitalización, y los pacientes pueden retomar su vida normal poco después. Además, la radiofrecuencia es particularmente indicada para nódulos tiroideos benignos, pacientes con alto riesgo de complicaciones quirúrgicas, o en casos de recurrencia tumoral.
“La radiofrecuencia ofrece una recuperación rápida y excelentes resultados estéticos, al no dejar cicatrices en el cuello", explica el doctor Reverter.
Ventajas frente a otros tratamientos
Comparada con la cirugía tradicional, la ablación por radiofrecuencia ofrece múltiples beneficios:
● Mínimamente Invasiva: No requiere grandes incisiones ni anestesia general.
● Rápida Recuperación: Los pacientes experimentan menos dolor y una recuperación más rápida.
● Preserva la Función Tiroidea: A diferencia de la cirugía, no afecta la función tiroidea normal.
● Eficacia Comprobada: Muchos pacientes reportan una significativa reducción del tamaño del nódulo y mejoría en los síntomas.