Este es el mejor restaurante de Gràcia para comer comida tradicional catalana, según la prensa gastronómica

El barrio de Gracia en Barcelona es conocido por ser uno de esos barrios que mantienen la esencia del pueblo que una vez fue. Pasear por sus calles aleja de la mente esa Barcelona gentrificada del centro, llena de bullicio y, salvo en las fiestas, todavía es un lugar tranquilo y apacible. Pero también es el hogar de algunos de los mejores restaurantes de la ciudad. Entre calles adoquinadas y fachadas modernistas, hay un lugar que ha capturado la atención de la prensa gastronómica, tal y como señala Hule y Mantel, destacando por su propuesta de cocina tradicional catalana. En una ciudad repleta de opciones culinarias, este restaurante se ha ganado su lugar no solo por la calidad de sus platos, sino por la autenticidad de su propuesta.

En un espacio pequeño, pero acogedor, este restaurante ha sabido combinar tradición y creatividad en cada plato que sale de su cocina. El secreto de su éxito reside en la pasión por los ingredientes frescos y en las técnicas clásicas que respetan los tiempos de cocción y la esencia de la gastronomía catalana. En definitiva, una parada obligatoria para los amantes de la gastronomía patria.

Fusión catalanojaponesa

El restaurante en cuestión es Morralet, dirigido por el chef Gonzalo Álvarez, un cocinero de origen venezolano que ha encontrado su hogar en la capital catalana. Su trayectoria es tan interesante como su cocina: después de formarse en Catalunya y trabajar en Japón, ha sabido incorporar detalles de ambas culturas en sus creaciones, siempre manteniendo como eje central la cocina catalana tradicional.

Sopa de cebolla en el Morralet de Gràcia Hule y Mantel null

En Morralet, los productos frescos de la huerta y las largas cocciones son protagonistas. Platos como su sopa de cebolla, una auténtica oda a la cocina casera, destacan por su sabor intenso y reconfortante. El chef dedica horas a caramelizar la cebolla para sacar su dulzura natural y lograr una profundidad de sabor inigualable. El toque final lo pone con una mezcla de quesos gruyère y emmental gratinados, que añaden un contraste crujiente y cremoso a un plato como es la sopa de cebolla.

Los imprescindibles

Otro de los platos estrella que no se pueden dejar pasar son las mollejas de ternera, preparadas con una técnica que el chef ha adaptado de la cocina andaluza. Las mollejas se rebozan ligeramente en una mezcla de harina de garbanzos y trigo, lo que les da una textura fina y crujiente por fuera, pero suave y jugosa por dentro. Se sirven sobre un cremoso parmentier de patata y se acompañan de cebollitas confitadas, lo que aporta un equilibrio perfecto entre sabores y texturas.

Morralet es un local pequeño, con una cocina a la vista y un ambiente cálido e informal. A pesar de su tamaño reducido, con espacio apenas para unas pocas mesas, el restaurante logra ofrecer una experiencia gastronómica íntima y de alta calidad. El servicio es cercano y eficiente, y el ambiente invita a disfrutar de una comida relajada mientras se aprecian los detalles de cada plato.

Con una carta que cambia según la temporada, Morralet es un rincón imprescindible para quienes desean probar lo mejor de la cocina catalana en el corazón de Gràcia. Ya sea que optes por su menú degustación o por alguno de los platos a la carta, la experiencia promete ser memorable.