El pueblo a 30 minutos de Barcelona donde se crió Aitana Bonmatí: una de las zonas más exclusivas para vivir
La jugadora del FC Barcelona se ha coronado en París con su segundo Balón de Oro consecutivo, igualando a Alexia Putellas
Aitana Bonmatí se ha coronado como una de las grandes futbolistas de la historia. La jugadora catalana recogió el pasado lunes, 28 de octubre, su segundo Balón de Oro consecutivo, que la acredita como la mejor jugadora del mundo de la temporada pasada. Entregado por la revista France Football, el premio ha reconocido el gran año de la jugadora azulgrana, que se ha impuesto en las votaciones a sus compañeras Caroline Graham Hansen y Salma Paralluelo.
De esta forma, Aitana ha emulado a su también compañera Alexia Putellas, que también se llevó dos veces consecutivas el máximo trofeo individual. Con dos Balones de Oro cada una, ambas son las futbolistas más laureadas de la historia desde que la revista francesa entre el prestigioso galardón.
El pueblo de Aitana
Los orígenes de la recién proclamada como mejor jugadora del mundo se encuentran en una pequeña localidad del Garraf. Aitana nació y se crio en Sant Pere de Ribes, un pueblo a media hora de Barcelona que mezcla la belleza histórica de su patrimonio con un entorno natural privilegiado. Allí dio sus primeros pasos en el mundo del fútbol antes de unirse a la cantera del club azulgrana. El C.F. Cubelles contribuyó a formar a la pequeña Aitana y de hecho, el campo municipal donde juegan lleva su nombre.
La jugadora siempre se ha mostrado orgullosa de su localidad natal, y de hecho ha estado muy presente en diferentes reportajes que se han grabado tras convertirse en una de las referentes en el fútbol femenino. Aitana siempre ha presumido de los valores que aprendió en su primer equipo y la escuela de su pueblo.
Entorno natural: playa y montaña
A las puertas del Parque Natural del Garraf, Sant Pere de Ribes disfruta también de su proximidad con la zona costera de las localidades del Garraf. Los paseos marítimos de municipios como Sitges, que está solo a 9 minutos en coche, le dan un acceso rápido a algunas de las playas más bonitas de la costa barcelonesa.
La combinación de proximidad entre el mar y la montaña, así como sus calles empedradas, han convertido el pueblo en uno de los municipios más exclusivos para vivir en la provincia de Barcelona.