
Koke Mata, propietario de la parada 431-438 del Mercat dels Encants Barcelona
Koke Mata, el comerciante que nació en el mercado más famoso de Barcelona: “Mi madre rompió aguas aquí”
El barcelonés guarda un cariño incalculable al lugar que lo ha visto crecer desde pequeño, y donde mantiene en pie la parada que durante más de 40 años regentaron sus padres
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Koke Mata lleva medio siglo vendiendo ropa en los Encants de Barcelona. Prácticamente desde el día en que nació. “Mi madre rompió aguas en el mercado”, explica a Metrópoli. Treinta días después de su llegada al mundo, el barcelonés ya estaba otra vez en la parada de sus padres, acostumbrándose al ajetreo habitual del lugar. “Es mi segunda casa”, expresa con una sonrisa.
Su nombre es Juan José, pero en los Encants todo el mundo lo conoce como Koke. Sus padres regentaron durante más de 40 años la parada número 431-438, la misma donde actualmente se encuentra Koke. “Cuando era pequeño acompañaba a mi padre cada fin de semana al mercado. Me gustaba mucho venir”, detalla a este medio.
La historia de Koke Mata, hijo dels Encants de Barcelona: “Mi madre rompió aguas en el mercado”
Por el puesto de sus padres pasaron todo tipo de productos: alfombras, zapatos, pinturas... Koke, en cambio, hace años que vende ropa de segunda mano. De hecho, su tienda es una de las más grandes del mercado: tiene 16 metros cuadrados y se ubica en la segunda planta.
Generaciones de clientes
Aunque a primera vista parezca un poco caótico, Koke tiene toda la ropa organizada. “La tengo dividida en secciones según si es más económico o más caro. Aquí coloco todo lo que vendo a cinco euros”, explica mientras se pasea por el lugar.
Es por ello que abarca a toda clase de clientes. “La gente que conoce el mercado es muy asidua a venir. Traen a sus hijos, a sus nietos… van pasando por aquí, generación tras generación”, apunta.

Cartel de ‘Todo a 5€’ de la parada 431-438 del Mercat dels Encants Barcelona
Los hallazgos son diarios e inabarcables. “Siempre te llevas más de lo que has venido a buscar”, relata el mismo a este medio. “Hay gente que viene a por un botón y acaba saliendo con una chaqueta de piel”, añade. Él lo sabe bien.
Morir en los Encants
“Tengo estudios, pero me gusta la vida aquí”, relata el mismo. Nos dice que se siente muy querido, tanto por los compradores como por los compañeros: “somos como una familia. Nos llevamos genial y vamos todos a una”, destaca a este digital.
Koke no entiende su vida sin los Encants, que después de tantos años se ha convertido en su segunda casa. Por eso, a sus 52 años tiene una cosa clara: “nací aquí y moriré aquí, y con mucho orgullo”.
Siete siglos de historia
El origen de los Encants se remonta al año 1300, cuando se empezaron a vender de manera regular objetos usados en las puertas de la muralla de Barcelona. Aunque inicialmente el mercado se ubicó fuera de la fortificación, más tarde se trasladó a la antigua Rambla de les Flors, cerca del mercado de Sant Antoni y, finalmente, en la plaza de Glòries.

Vista panorámica del Mercat dels Encants con la Torre Glòries al fondo Barcelona
La actividad de los Encants se ha desarrollado desde siempre en espacios abiertos, poniendo los objetos directamente en el suelo para su venta. Se trata de una actividad esencialmente nómada y con un toque libre e informal.
En 2013 se estrenó el nuevo edificio icónico de los arquitectos b720 donde se ubica actualmente el mercado, año en el que también se incorporó a la red de Mercados Municipales del Ayuntamiento de Barcelona. El rasgo más característico de este edificio es la colosal cubierta de espejos dorados situados a 25 metros de altura, que protege del sol o la lluvia a comerciantes y usuarios.
Subasta única en Europa
Cada lunes, miércoles y viernes de 8:00 a 9:00 horas se organiza la tradicional subasta del Mercat dels Encants, abierta al público. Es entonces cuando se pujan a ciegas los diferentes lotes de productos que los comerciantes pondrán después a la venta en sus paradas. El Mercat dels Encants es el único de Europa que todavía conserva esta práctica ancestral.