El Mobile World Congress de 2020, suspendido tras las deserciones masivas de las grandes multinacionales, anticipó que el mundo entraba en una crisis global por culpa de un virus desconocido y letal. El Mobile de 2021, fijado entre el 28 de junio y el 1 de julio, debería ser el indicador perfecto que reactivará a Barcelona como capital de los negocios y destino seguro y atractivo para el turismo internacional. A tres meses y medio de su celebración, sin embargo, se abren muchas dudas al reproducirse los mismos patrones de hace un año. Los temores a una nueva cancelación se disparan.
GSMA, responsable del Mobile, asume que la edición de 2021 "será diferente, con menos expositores y visitantes". John Hoffman, consejero delegado del MWC, recalca que solo un incremento de la pandemia impediría la celebración del certamen, aunque asume que habrá más bajas tras las renuncias de Ericsson, Nokia, Sony, Facebook, BT y Oracle. Este viernes, en cambio, GSMA ha dado a conocer que la empresa TelcoDR será uno de los mayores exhibidores en el Mobile con un espacio de 6.000 metros cuadrados.
Las administraciones públicas –Gobierno español, Generalitat y Ayuntamiento–, y los sectores económicos de la ciudad, tocados de muerte, piden que se celebre. A pesar de las bajas anunciadas –y las que llegarán en los próximos días o semanas– y la suspensión de la feria audiovisual ISE –que se tenía que celebrar del 1 al 4 de junio–, los preparativos para el Mobile se aceleran para que se pueda hacer con las máximas garantías y numerosas medidas de seguridad. "Será un Mobile con mucha prevención, con pruebas cada 72 horas, sin pagos en metálico y con comida individualizada", explica una fuente próxima a GSMA.
Ada Colau, la alcaldesa que renegaba del Mobile en 2015, confía ahora en la gran feria de la telefonía móvil para revertir la depresión de una Barcelona muy castigada por el coronavirus. En 2020, las previsiones para el MWC indicaban que generaría 14.000 puestos de trabajo temporales y tendría un impacto de 490 millones de euros, con la visita de 110.000 visitantes. Un año después, las cifras serán más modestas, pero el Mobile tiene que ser "el semáforo verde", apuntan desde el Ayuntamiento, que ponga a Barcelona en el mapa. En las administraciones públicas y en los sectores económicos implicados, algunos ya se encomiendan a los poderes divinos para evitar una nueva catástrofe.
JOHN HOFFMAN: TEST CADA 72 HORAS
El consejero delegado del GSMA, John Hoffman, máximo responsable del congreso de móviles, asegura que el evento "se hará" y solo se cancelará si hay un repunte importante de contagios. Este año, como máximo, asistirán unas 50.000 personas, aproximadamente la mitad de las han venido otros años. Las cifras, probablemente, incluso serán más bajas a tenor de las cancelaciones y el bajo número de reservas registradas hasta ahora en hoteles de la ciudad.
La organización trabaja en la obligatoriedad de hacer a los asistentes test cada 72 horas. Hoffman recuerda que la mayoría de compañías aéreas exigen un test para volar. Así, las personas que vengan a Barcelona para el Mobile tendrán que pasar una nueva prueba tres días después de haberse hecho la primera. "Se trata de prevención. Cuando acabe el certamen, queremos que los participantes puedan volver a casa de forma segura", añade Hoffman.
Los test se los tendrán que hacer todos, también los que hayan sido vacunados. Para llevar a cabo las pruebas se instalarán puntos en hoteles, en Fira de Barcelona y en otras zonas de la ciudad. Hoffman añade que el uso de la mascarilla será obligatorio, así como la distancia social. También se trabaja para que todos los pagos sean con tarjeta o móvil y en una renovación constante de la ventilación del recinto.
El Mobile de este año priorizará también la participación telemática. Así se ha hecho este mes de febrero en el MWC de Shanghái, que también organiza GSMA. Gracias a la conexión en línea, el congreso ha llegado a más gente. En la ciudad china acudieron unos 200 expositores y una cincuentena se dio de baja antes del inicio. Hoffman cree que a Barcelona vendrán los que tengan que hacer gestiones y sea necesario hacerlas presencialmente, dijo en una entrevista en RAC1.
COLLBONI VE EN EL MOBILE EL INICIO DE LA RECUPERACIÓN
El primer teniente de alcaldía del Ayuntamiento, Jaume Collboni, explica que el Mobile de este año debe ser el evento que relance "la proyección internacional de Barcelona". Aunque reconoce que "no será un Mobile normalizado", opina que "muchas personas quieren participar presencialmente". Collboni habló el pasado martes con Metrópoli Abierta cuando solo se había producido una baja, la de Ericsson.
A principios de junio, Fira de Barcelona ya debería haber organizado el ISE (Integrated Systems Europe), la feria audiovisual más grande del mundo a la que el líder del PSC hizo mención junto al salón Automobile, previsto del 8 al 18 de julio. Ahora ya se sabe que el ISE, la antesala del Mobile, no se hará. La organización ha dicho que la suspensión se debe a la incertidumbre por la pandemia y a las restricciones para viajar. Collboni sostiene que la asistencia al Mobile y al resto de salones vendrá marcada por la movilidad internacional, el momento sanitario que se viva y la situación económica de las empresas.
Collboni, no obstante, lanza un mensaje de optimismo: "Estamos convencidos de que en primavera y en verano se producirá la recuperación económica de Barcelona. La reactivación no tiene marcha atrás. Este verano no estaremos en los niveles de 2019 pero se dará un paso hacia delante respecto a 2020". Para el primer teniente de alcaldía, la diferencia respecto a 2020 es que entonces "no sabíamos a qué nos enfrentábamos". "Ahora sabemos cómo podemos combatir el virus y cómo nos podemos proteger", añade. Collboni confía especialmente en la vacunación de la población para frenar la pandemia y la recuperación económica.
El concejal recuerda que el Mobile es una evento privado y que cualquier decisión que se tome es del GSMA, apunta sobre el futuro del congreso, que tiene una participación extranjera de más del 80%. Como en otras ediciones, el papel del Ayuntamiento y del resto de administraciones públicas, será "tener preparada la ciudad a nivel sanitario y de movilidad, seguridad y conexiones internacionales". Preguntado sobre qué medidas se tomarán desde el punto de vista sanitario, más allá de los test anunciados por Hoffman, Collboni no avanza ninguna. "Haremos lo que nos indiquen las autoridades sanitarias, en este caso la Generalitat y el Procicat".
FOMENT PIDE DETERMINACIÓN
El sector económico pide determinación y prudencia. Josep Sánchez Llibre, presidente de Foment del Treball, recuerda que la patronal "da su apoyo a todas las instituciones (Gobierno de España, Generalitat, Ayuntamiento y Fira de Barcelona) que, junto al organizador, GSMA, trabajan para hacer posible que el Mobile World Congress se pueda celebrar entre el 28 de junio y el 1 de julio".
En su valoración, Sánchez Llibre añade: "Faltan más de tres meses y en un contexto de incertidumbre es necesario trabajar con la determinación de hacer realidad un evento que es fundamental para la ciudad y con todos los escenarios previstos. Estamos seguros de que, igual que ocurrió en 2020, se tomará la mejor decisión, atendiendo siempre a los indicadores sanitarios y la capacidad efectiva para el control y la contención de la epidemia".
LA LENTA RECUPERACIÓN DE LA RESTAURACIÓN
Roger Pallarols, director general del Gremio de Restauración, quiere mostrarse “muy cauteloso” sobre la celebración del Mobile, pero al mismo tiempo se ilusiona con el impacto que tendría en un sector muy castigado por la pandemia, afectado todavía por restricciones horarias y de ocupación. “La cancelación de Mobile supuso el inicio del drama. La celebración del Mobile de 2021 marcaría el inicio de un proceso de recuperación que será lento”, recalca Pallarols. “Barcelona volvería a situarse en el mapa. Las ciudades necesitan estímulos para avanzar y reactivarse”, añade.
El director del Gremio argumenta que Barcelona necesita “optimismo” y “determinación” para superar un año muy complicado. “La ciudad necesita turistas y congresos”, incide Pallarols, muy crítico con la gestión de la pandemia que hace el Govern: “Desgraciadamente no asumen que la crisis económica se debe atender con la misma determinación que la crisis sanitaria porque la destrucción empresarial ha sido muy dura”.
Pallarols espera que bares y restaurantes “puedan trabajar todo el día” a corto plazo y añade que la Generalitat “no puede pedir más sacrificios al sector”. “Si cae la restauración, cae Barcelona. Cada día cierran negocios. La celebración del Mobile sería el mejor antídoto contra la crisis. Más allá de su impacto económico, tendría un gran impacto moral”, sentencia.
POCAS RESERVAS EN LOS HOTELES
El director general del Gremio de Hoteles, Manel Casals dice que el Mobile volverá a poner a Barcelona en el mundo si la evolución de la pandemia es favorable. "Es un gran acontecimiento, de mucha repercusión mediática e internacional". Sin embargo, Casals se muestra cauto con los asistentes y opina que vendrá mucha menos gente de la que se dice. A poco más de tres meses del Mobile, dice que el número de reservas es "ínfimo". En voz baja dice que ronda el 10%. "Será un Mobile distinto", incide.
Hoffman desveló que en los hoteles se harán test de antígenos. Casals lo confirma. Y recuerda el compromiso de los establecimientos hoteleros para combatir la pandemia en los momentos más críticos de 2020: "Hubo hoteles que funcionaron como hospitales. Los hemos ofrecido como puntos de vacunación. Con el Mobile haremos lo mismo. La organización puede disponer de nuestros hoteles".
El Gremio de Hoteles dibuja una situación "muy catastrófica" en el sector. "La gran mayoría de establecimientos siguen cerrados. Solo están funcionando un 25% de los negocios. Con el confinamiento no puede venir nadie. O nos reactivamos o tienen que llegar ayudas", subraya Casals. La patronal de los hoteleros da por perdida la Semana Santa. "A mediados de junio esperamos que haya abiertos el doble de hoteles pero otros muchos continuarán cerrados. El verano será malo, con una ocupación que rondará el 30 o el 35%".
EL TAXI Y SU GRAN SEMANA
El Mobile, si se hace, obligará a introducir cambios en la movilidad de Barcelona. El sector del taxi se prepara para una semana intensa, con atascos en las inmediaciones del recinto ferial y jornadas maratonianas si se reducen las actuales restricciones horarias. El pasado martes, los taxistas se reunieron con Rosa Alarcón, concejal de Movilidad, para reforzar las medidas sanitarias. En el encuentro expresaron su rechazo por el regreso de Uber a Barcelona.
"El sector del taxi siempre ha estado con el Mobile. Siempre", destaca Tito Álvarez, coordinador de Elite Taxi Barcelona. "Durante el día, la facturación aumenta, pero hay muchos atascos y algunos clientes prefieren moverse en metro. El Mobile, en cambio, es muy rentable para los taxistas que trabajan por la noche, pero falta ver cómo y cuándo se levantarán las actuales restricciones", comenta Álvarez.
Los taxistas piden carriles especiales para circular durante el Mobile. También están pendientes de cómo se gestionarán las paradas. Del 28 de junio al 1 de julio esperan tener mucho trabajo, pero recuerdan que ellos no pueden aumentar las tarifas como hacen hoteles y restaurantes. El Mobile, también para ellos, ilusiona por el impacto económico inmediato que tendría y, sobre todo, por el mensaje que Barcelona daría a todo el mundo.
AUTOBUSES LANZADERA
Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) también prepara un dispositivo especial para el Mobile. TMB forma parte de la comisión que coordina el Ayuntamiento de Barcelona en la que participan los principales sectores de la ciudad. La empresa metropolitana, por primera vez, también tiene línea directa con el Mobile para garantizar la mejor cobertura. En la edición de 2021 destacarán 12 0 13 autobuses lanzaderas que unirán las dos ferias de Barcelona entre las 7:00 horas y las 21:00 horas, explica el director de comunicación de TMB, Santiago Torres.
La compañía que preside Alarcón también tiene definidas las medidas para reforzar la línea 9 del metro. Tanto entre el aeropuerto y la Fira como entre Collblanc y la Fira, con desplazamientos más rápidos y un doble carrusel. TMB también piensa aumentar los convoyes de las líneas 10 y 5 en las horas punta para evitar aglomeraciones.