¿Cuánto cuesta a los barceloneses la Sindicatura de Greuges?
La oficina del defensor municipal gasta un millón de euros al año: el titular cobra más de 80.000 euros
25 octubre, 2021 00:00Noticias relacionadas
Barcelona tiene desde 2005 una Sindicatura de Greuges municipal. La oficina tiene por encargo defender los derechos fundamentales y las libertades de los ciudadanos y ciudadanas de Barcelona y supervisa la actuación de la administración municipal y de los servicios públicos que dependen del Ayuntamiento. Desde finales de septiembre, el defensor de los ciudadanos de la capital catalana es David Bondia, expresidente del Institut de Drets Humans de Catalunya y doctor en Derecho. Con anterioridad, el cargo lo ocuparon dos mujeres: Pilar Malla (2005-2010) y Maria Assumpció Vilà (2010-2021).
A diferencia del Síndic de Greuges de Catalunya, que dispone de un presupuesto propio que emana del Parlament de Catalunya, la oficina local depende económicamente del consistorio barcelonés. Pero, ¿cuánto cuesta la sindicatura de Barcelona a los bolsillos de los ciudadanos? y ¿con qué recursos cuenta la oficina para hacer su trabajo? Según el portal de transparencia, en 2020 tuvo un presupuesto 1.036.791 euros y el gasto anual ascendió a 1.037.375 euros [ver aquí].
EL SÍNDIC COBRA MÁS DE 80.000 EUROS AL AÑO
La mayoría de gastos del año pasado corresponden a personal: 952.603 euros frente a los 951.402 presupuestados. El sueldo del síndic es de 81.972 euros brutos anuales. La nómina de Bondia es la misma que ha tenido su antecesora. La oficina del síndic de Barcelona cuenta con 13 personas contratadas -incluido el ombudsman y la adjunta al síndic, Natàlia Ferré, ambos designados por el pleno-. Más de la mitad lleva la asesoría técnica y elabora los informes del defensor municipal. 532.346 euros van destinados a pagar a funcionarios y 140.944 para personal eventual. La otra partida económica más importante fue para gastos corrientes y de servicios, 82.324 euros sobre 85.389 presupuestados.
Bondia fue elegido síndic de Barcelona en el pleno de finales de septiembre. El nuevo defensor municipal contó con los votos favorables del gobierno, Barcelona en Comú y PSC, y de ERC y JuntsxCat. Por contra, Ciutadans, Barcelona pel Canvi, PP y la regidora no adscrita Marilén Barceló votaron en contra por ver a Bondia cercano a las tesis independentistas y a los comunes. Ésta ha sido la primera vez que un síndic/a de la ciudad no cuenta con el aval de todo el pleno en su nombramiento. Solo en la reelección de Vilà, en 2016, la CUP se abstuvo.
Según el informe anual de 2020, la sindicatura hizo el año pasado 3.543 actuaciones, de las que 1.988 fueron quejas y 1.518 consultas. El ámbito de la administración pública fue del que más reclamaciones se recibió, 802 en total, de las que 296 fueron de actividad económica. Las denuncias de calle y convivencia ascendieron a 494, de las que 299 fueron de movilidad. De personas y sociedad, se tramitaron 383 expedientes, de los que 166 fueron de servicios sociales. Y de hábitat urbano llegaron 309 quejas, de las que 121 eran de medio ambiente [ver aquí, página 163].
EL PRESUPUESTO DE LA SINDICATURA DE CATALUNYA, SEIS VECES MÁS ALTO
Si el gasto de la Sindicatura de Greuges de Barcelona es superior al millón de euros, el presupuesto del síndic de greuges de Catalunya es casi seis veces mayor. Según los datos de la página web [ver aquí], las cuentas de este año ascienden a 6.817.143 millones de euros, de los que 5.947.413 se dedican a gasto de personal. El síndic de Catalunya es Rafael Ribó. Y lo es desde 2004. Desde marzo de 2019, Ribó, que fue secretario general del PSUC y presidente de ICV, está en funciones. El defensor ya debería haberse jubilado, pero el Parlament aún no ha nombrado a la persona que le sustituirá.
Ribó cobra actualmente 129.373,44 euros brutos anuales [ver aquí]; el adjunto general al síndic, Jaume Saura, 113.103,34 euros; y la adjunta de Infancia, Maria Jesús Larios, 103.190,92 euros. El sueldo del equipo directivo es de 94.890,74 euros, mientras que las nóminas del personal auxiliar y los asesores oscilan entre los 23.610,62 y los 76.273,68 euros. La plantilla está compuesta por una sesentena de cargos.
La Sindicatura de Greuges de Catalunya puede supervisar también al Ayuntamiento de Barcelona y a los entes, organismos, institutos y empresas públicas que dependen de él. Es decir, estas funciones están duplicadas con el síndic de la ciudad, ya que ambos ombudsman, el de Barcelona y el catalán, vigilan al gobierno municipal. El problema se arrastra desde 2005 -la oficina del defensor de la capital catalana es más reciente-, sin que por el momento el consistorio y el Parlament hayan resuelto el conflicto.