Susi, Yoyo y Bully: las elefantas que agonizan en el Zoo de Barcelona

Susi, Yoyo y Bully. Son las tres elefantas del Zoo de Barcelona que agonizan. Los animales llevan años esperando su traslado a un santuario francés en el que poder vivir en condiciones dignas, sin ser expuestos ante el público. 

La institución defiende el trabajo de resocialización que llevaron a cabo con las tres elefantas, ya que todas estaban solas o fueron rechazadas por sus manadas: "El Zoo trabajó por su bienestar y las acogió, dedicándoles todos sus conocimientos y un gran esfuerzo por parte de su personal", se puede leer en la página web. "Para hacerlo lo mejor posible, el Zoo contactó con uno de los mejores expertos en elefantes cuidados por humanos del mundo, Alan Roocroft, para asesorar al equipo de Barcelona", asegura en el mismo comunicado la instalación. Finalmente, en 2013 las juntaron y así permanecen hasta día de hoy, aunque las asociaciones animalistas no comparten la "misión" del zoológico.

Dos de las elefantas del Zoo de Barcelona / ZOO DE BARCELONA

EL DESASOSIEGO DE SUSI

El foco está puesto en Susi. ¿Por qué? La elefanta, de unos 50 años, sufrió una importante pérdida entre las paredes del Zoo de Barcelona: la de su matriarca Alicia. Alicia murió delante de Susi, eutanasiada por unos dardos que los trabajadores de la institución le lanzaron en horario de visita, ante los niños y niñas de la escuela Caridad Serinyana de Cadaqués.

Desde entonces, Susi entró en una profunda depresión. Por ello incorporaron a sus dos compañeras, Yoyo y Bully, aunque Alejandra García, la Directora del Santuario Equidad, aseguró: "Lo tremendo es que ahora quienes van al zoo ven tres elefantas en un mismo espacio pero que no están socializadas, no se comunican entre ellas, no comparten, no se entienden".

Las elefantas del Zoo de Barcelona / ZOO DE BARCELONA

DEL CIRCO AL ZOO

Susi nació en estado salvado en 1973 y al poco tiempo fue secuestrada. La elefanta fue exhibida en un circo hasta que finalmente la trasladaron al Zoo de Valencia y luego, en 2002, llegó a Barcelona.

La plataforma animalista Zoo XXI nació hace ya 13 años por la preocupación respecto a Susi y "todavía sigue allí", explica a Metrópoli uno de sus miembros, Leonardo. "Logramos que en el 2019 aprobaran una ordenanza para la transformación de los zoológicos, pero no se está aplicando", lamenta.

Las elefantas del Zoo de Barcelona / ZOO DE BARCELONA

SALUD DETERIORADA

Según Zoo XXI, en 2008, el estado de salud de Susi comenzó a deteriorarse de forma considerable: "La limitación espacial (los elefantes caminan cerca de 50km al día), la denigración constante, el suelo que pisa (el cemento produce enfermedades en los elefantes) son solo algunos de los sinsabores de la vida de Susi". Aún así, el equipo insiste: "No decimos que Susi esté enferma ahora. Lo que sí decimos es que la cautividad compromete su salud física y psicológica".

A modo de ejemplo: "Ciertas estereotípias, como la coprofagia, pueden provocar la infestación en caso de parasitosis, el lanzamiento de la trompa puede provocar daños a nivel de la trompa y a nivel cervical. El paseo aberrante o balancearse puede provocar desgaste energético, desgaste desigual de las zonas plantares anteriores, desarrollo asimétrico de masa muscular a nivel de cuello y/o exacerbación de problemas ortopédicos concomitantes".

UN DOCUMENTAL

El caso de Susi llamó tanto la atención que TV3 produjo un documental: "Susi, una elefanta en la habitación". Su emisión, en 2021, provocó que que más de 70.000 ciudadanos firmasen una petición a través de Change.org contra el Ayuntamiento de Barcelona por la negativa de su centenario Zoo de liberar a la elefanta. Las justificaciones son la edad de la paquiderma y el estrés que esto podría causarle.

El revuelo, además, se produjo después de una multa de 28.000 euros impuesta por la Generalitat al Zoo por la muerte de nueve aves durante el temporal Gloria.

Imagen del documental "Susi, una elefanta en la habitación" / TV3

LAIA BONET LANZA BALONES FUERA

La última polémica en torno a Susi y sus dos compañeras vino de la mano del director del Zoo, Sito Alarcón, y la teniente de alcalde Laia Bonet. El equipo del documental emitió un comunicado que explicaba cómo Alarcón solicitó al equipo del documental la retirada de su imagen, a pesar de haber firmado un consentimiento previo para ser entrevistado. Esta solicitud provocó que TV3 tomara la decisión de retirar el documental mientras se resolvía la situación. "Él hablaba en representación del Ayuntamiento, de sus jefes políticos", explica Leonardo, de Zoo XX. Por lo que no entienden la retirada de su imagen personal.

Por otra parte, la realización del documental pidió la intervención de la alcaldesa Ada Colau, la cual derivó el asunto a Laia Bonet. La regidora echó balones fuera y relegó la participación en Sito Alarcón. "Hemos enviado una carta al Ayuntamiento para pedir explicaciones. Intuimos que el director del Zoo ha utilizado los servicios públicos de la empresa Barcelona Serveis Municipals para hacer valer una ley a título personal", esgrime Leonardo. "Parece que se arrepiente de haber participado e intenta ejercer una estrategia que tiende claramente a coartar la libertad de expresión".

Aunque Leonardo lamenta que "no les hayan escuchado", la plataforma y otras entidades animalistas, así como distintas personalidades, siguen luchando por el traslado de Susi, Yoyo y Bully a un santuario.

Contactados por este medio, el Zoo de Barcelona no ha respondido a las preguntas de Metrópoli sobre el estado de las elefantas.