Una torre de vigilancia de Barcelona cerrada por la huelga de los socorristas

Una torre de vigilancia de Barcelona cerrada por la huelga de los socorristas CGT

El pulso de la ciudad

'Bandera blanca' en las playas de Barcelona: socorristas y Ayuntamiento firman la tregua tras un verano en huelga

Los 80 trabajadores que conforman actualmente el servicio alcanzan un acuerdo con sustanciosas mejoras tras un agosto caliente

Los socorristas cierran las torres de vigilancia e izan bandera roja en las playas de Barcelona en señal de protesta

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Las playas de Barcelona retoman la calma con la vuelta de los socorristas a sus torres de vigilancia tras una huelga que ha durado 27 días y que ha marcado la agenda interna del consistorio este agosto. 80 trabajadores, con apoyo del sindicato CGT, de la oposición en bloque y la atenta mirada mediática han logrado poner contra las cuerdas al aparato municipal.

El consistorio, tal y como avanzó Metrópoli, ante las amenazas de huelga prometió 'capear' el parón bajo el pretexto de que los presupuestos estaban cerrados y el contrato adjudicado. Pocos días después, llevaron a la primera negociación una propuesta que, por insuficiente, fue rechazada tanto por la parte sindical como por la misma asamblea.

La batalla, que arrancó el 1 de agosto, se libraba, no obstante, desde la noche de Sant Joan, cuando los trabajadores dejaron un descubierto y se negaron a participar en el dispositivo como protesta por las deficiencias del servicio.

El pasado 27 de agosto, tras casi un mes de movilización, de banderas amarillas y manifestaciones frente al ayuntamiento y la sede del PSC, los trabajadores del servicio municipal, subrogados desde finales de 2023 a la empresa FCC --que ostenta la adjudicación municipal-- alcanzaron un acuerdo con los representantes municipales.

Manifestación de socorristas frente al ayuntamiento de Barcelona

Manifestación de socorristas frente al ayuntamiento de Barcelona CGT

Mejoras en el servicio

El sindicato ha valorado como una victoria el resultado de la huelga. Si bien no se alcanzan las peticiones iniciales, la temporada baja gana 26 días de trabajo y la incorporación de tres refuerzos, mientras que la temporada alta gana 21 días. 

El documento también contempla la participación de los trabajadores en el proyecto para reformar los módulos de salvamento. Asimismo, el consistorio se compromete a garantizar el seguimiento del contrato actual para fiscalizar las acciones de la empresa.

Hoy, tras la firma del texto en el Departament de Treball, los ochenta trabajadores vuelven a sus torres. Lo hacen, no obstante, dejando en el aire que la lucha no termina. El objetivo final es claro: que Barcelona goce de un buen servicio completo de socorrismo durante todo el año.

Este verano, no obstante, se cierra con la máxima de que 80 trabajadores "unidos y organizados" han puesto contra las cuerdas al aparato municipal. Las manifestaciones, la huelga y el contacto con los partidos de la oposición ha sido esencial para lograrlo.

Una treintena de socorristas han protestado frente al Ayuntamiento de Barcelona para pedir mejores condiciones de trabajo

Una treintena de socorristas han protestado frente al Ayuntamiento de Barcelona para pedir mejores condiciones de trabajo ALBERTO PAREDES - EUROPA PRESS

Comparecencia municipal

De hecho, el pacto se firma menos de una semana después de que, a petición de Junts, se convocara una comisión extraordinaria en el consistorio. El teniente de alcalde de seguridad, Albert Batlle, compareció ante los grupos de Junts, ERC, Barcelona en Comú, PP y Vox, que recriminaron deficiencias en la gestión del conflicto y la falta de información que desde el gobierno se facilitó al resto de grupos.

Tuvo que dar Batlle explicaciones de todo lo que se estaba haciendo y ratificar el compromiso del Ejecutivo local para llegar a un entendimiento con la plantilla. De forma previa, tanto Batlle como la primera teniente de alcalde, Laia Bonet, hicieron declaraciones públicas apelando a la "responsabilidad" de los trabajadores.

Presión pública

"Estamos hablando de un servicio crítico en el momento más crítico del año y esperamos que todos seamos conscientes de lo que esto significa", sugería la número dos de Collboni en una suerte de presión para terminar con el parón.

Unos socorristas en servicios mínimos en las playas de Barcelona

Unos socorristas en servicios mínimos en las playas de Barcelona Socorristas de Barcelona (@socorristas.bcn)

Si bien la negociación ha terminado con cesiones por ambas partes hasta alcanzar un término medio, no se pudo evitar que la situación saltara a la palestra, precisamente, por el riesgo a la seguridad que suponía la ausencia de los rescatistas en unas playas por las que cada año pasan unos cinco millones de personas, según datos esgrimidos por ERC en la comisión.

Seguridad y vigilancia

En este sentido, los vigilantes no solo cubren el servicio de arena y agua, sino también espigones y paseo marítimo. Un trabajo impulsado, explican, por un sentimiento del deber, que se demuestra en momentos como cuando socorristas fuera de servicio participaron en algunos de los tres rescates, reanimaciones y atenciones por ahogamientos que se han producido este mes.

Una caseta de socorristas con carteles por la huelga

Una caseta de socorristas con carteles por la huelga Socorristas de Barcelona (@socorristas.bcn)

Por ahora, los trabajadores entierran el hacha tras un mes de duras negociaciones, de cruces de declaraciones, de demostraciones de fuerza y con "la buena sensación de haber puesto en valor el servicio". Solo queda dar margen a la administración para que cumpla con lo firmado.