Carrer Compte Borrell, la gastronomía que reina en el Eixample

Situada en pleno corazón de Barcelona, entre las estaciones de metro de Urgell y Diputació, el carrer Compte Borrell se ha posicionado en los últimos años como uno de los epicentros de la gastronomía con más calidad de la Ciudad Condal.

Sin ser una de las calles con más extensión, en este enclave de l'Eixample podemos encontrar algunos de los restaurantes con más renombre de la capital catalana. A continuación destacamos los mejores. 

MIKASA

En el número 145, se encuentra Mikasa. Es uno de los locales japoneses que goza de una mayor popularidad. Llama la atención que en su carta no encontraremos ni rastro del sushi.

Y es que el equipo de cocineros de Mikasa ha logrado reunir una de las mejores propuestas de platos típicos de Japón dejando de lado su producto estrella. Especialmente para cenar es recomendable reservar antes de acudir, de lo contrario puede que nos quedemos sin mesa durante un buen rato. Aunque, como buen japonés, siempre quedará la opción take away.

MORRO FI

Morro Fi es una de las vermuterías más populares de Barcelona. El ambiente que se respira en su interior unido a la calidad de sus tapas han conevertido a Morro Fi en un must para los expertos del vermut. 

Se encuentra en la esquina que une Compte Borrell con Consell del Cent y destaca por haberse convertido en el lugar perfecto al que acudir los típicos domingos por la mañana a tomar algo con nuestros amigos o en cualquier otro momento de la semana en la que nos queramos dar un capricho. 

GATBLAU

El número 102 celebra otra de las opciones más interesantes cuando se trata de referirnos a la la variedad de las diferentes propuestas gastronómicas que nos ofrece la ciudad. En su interior, los productos saludables son los protagonistas. Con una gran cantidad de platos que apuestan por el comercio de proximidad.

Sus dueños apuestan por la cocina tradicional, como su pan, elaborado por ellos mismos, o su amplio surtido de quesos con los que tratan de conquistar a los paladares más exigentes. En Gatblau, los amantes de la gastronomía catalana tienen una cita que no se pueden perder.