Un parque en Vallcarca sustituirá a unos jardines fulminados pese a la oposición vecinal

Las zonas verdes de Vallcarca i els Penitents no dejan de reducirse. En un barrio con una importante densidad de tráfico debido al paso de la Ronda de Dalt y la presencia del Hospital de la Vall d'Hebron, el recorte de estos espacios tiene una difícil justificación.

El parque de la Ronda de Dalt es uno de los recintos de esta tipología que tienen los días contados. El rechazo vecinal no ha sido suficiente para frenar los planes del regidor del distrito, Eloi Badia, quien fulminará la zona en favor del ladrillo con la construcción de bloques de viviendas.

Los Jardines del Dr. Comas i Llobera también desaparecerán. En su lugar, se construirá el IES Vallcarca, un instituto que finalmente se instalará en esta zona verde pese a la oposición vecinal. Para compensar esta supresión, el Ayuntamiento construirá un nuevo parque cerca de esta instalación.

JARDINES DE ANNA PIFERRER

El Ayuntamiento ha aprobado este mes de marzo el proyecto de urbanización de los Jardines de Anna Piferrer, una nueva zona verde que se ubicará en el solar en desuso que se encuentra en la calle homónima que inicialmente iba a ser utilizado para la creación del mencionado IES Vallcarca.

Para llevar a cabo esta iniciativa en el barrio, el consistorio barcelonés invertirá una cuantía económica que se ha establecido en 1.982.400,13 euros.

Jardines del Dr. Comas i Llobera / METRÓPOLI - RP

PROYECTO

Según indica el proyecto ejecutivo, el nuevo parque busca suplir los usos de los Jardines del Dr. Comas i Llobera. La propuesta apunta que "la estrategia de diseño parte del tratamiento de la topografía", al ser una calle que cuenta con un gran desnivel. Por ello, el objetivo pasa por salvar la pendiente mediante un "sistema de plataformas adaptadas al terreno".

El nuevo espacio contará con "muros vegetales" para incrementar la "superficie plana de la plataforma", que al mismo tiempo construirán una "fachada verde hacia la calle" y ayudarán a marcar los accesos al recinto.

La iniciativa prevé que la primera plataforma se convertirá en un "bosque urbano" gracias a la "plantación densa de árboles" que generará "una protección vegetal y un espacio de sombra". La segunda se destinará a un área lúdica que se percibirá como "un espacio de juego y actividad física para todas las edades", por lo que combinará juegos infantiles con una pista de petanca. La tercera plataforma se convertirá en una zona "versátil" que podrá ser utilizada como "espacio de reunión" y escenario de "eventos con presencia de público".

INSTITUTO

La construcción del nuevo instituto desató la polémica en el barrio. En primera instancia, el emplazamiento escogido para su construcción fue el solar en el que finalmente se realizarán los Jardines de Anna Piferrer.

Residentes cercanos al solar denunciaron esta modificación, y una sentencia del Tribunal Superior de Justicia emitida en el año 2013 les dio la razón, por lo que dicha opción de suelo quedó descartada.

Render de los futuros Jardines de Anna Piferrer / AJ BCN

En consecuencia, el consistorio optó finalmente por la liquidación de los Jardines del Dr. Comas i Llobera para llevar a cabo esta edificación. El Ayuntamiento adjudicó, en 2020, una partida de 367.921,77 euros para llevar a cabo los estudios, planes y proyectos previos a la materialización del centro.

RECHAZO VECINAL

La Federació de Barris de Gràcia explicó a este medio su rechazo a construir el IES Vallcarca en los Jardines del Dr. Comas i Llobera. El colectivo vecinal lamentó que esta decisión implicaría la supresión de una zona verde del barrio.

Como alternativa, la federación optó por la rehabilitación arquitectónica del instituto Vall d'Hebron, con capacidad suficiente para acoger al alumnado, una propuesta que fue descartada por el consistorio. Fuentes vecinales recuerdan ahora que que "había espacio suficiente en el mismo instituto" como para no tener que "construir" una instalación nueva, pero apuntan la obligatoriedad de llevar a cabo una reforma. "El instituto se está cayendo a trozos, necesita una rehabilitación y la instalación de ascensores", subrayan.

Además, inciden en su posición contraria a la destrucción de los Jardines del Dr. Comas i Llobera, un espacio que los residentes querrían conservar y que evitaría el desembolso de urbanizar el nuevo parque.