Gabriel Rufián no ve del todo claro su candidatura a la alcaldía de Santa Coloma de Gramanet. En declaraciones al periodista Frank Blanco en 8TV, Rufián ha puesto sobre la mesa su situación laboral y personal: "Llevar a un equipo como el de Madrid es un trabajo muy bestia", decía este lunes, 5 de septiembre, el de ERC refiriéndose a su trabajo en el Congreso. "Si me lo puedo compaginar con vivir, lo intentaré".
Desde abril se venía rumoreando que Rufián había recibido la oferta desde "la sección local", como él mismo ha confirmado, pero no se sabía con exactitud si la aceptaría. Unos meses después, en junio de este año, el diputado despejaba las dudas y expresaba en sus redes sociales: “Que bonito que es volver”, un mensaje que acompañó de fotografías en Santa Coloma, con un cartel del partido y con las reuniones que mantuvo en la población del área metropolitana.
"VIVO EN UN AVE"
En el programa de 8TV Rufián ha añadido que la petición a la alcaldía nace de la dirección del partido, del presidente Oriol Junqueras: "Si me lo hubiese pedido cualquier otro, no me lo pensaría". Y es que el de ERC está estresado. "Vivo en un AVE", ha asegurado en televisión.
Sobre el liderazgo de la socialista Núria Parlon también ha opinado: "El PSOE gobierna de manera absoluta en Santa Coloma desde hace 31 años. Me parece insano que alguien gobierne tanto tiempo". Por último, Rufián ha vuelto a dejar la duda en el aire: "Me lo estoy pensando".
AHORA HAY UNA DIFERENCIA DE 15 EDILES
Actualmente, la diferencia entre ERC y PSC en Santa Coloma es de 15 ediles. Con Rufián, esa distancia se recortaría de forma significativa, valoran fuentes republicanas, y habría que ver si Parlón reeditaria la mayoría absoluta. Un mayor número de concejales de ERC en Santa Coloma se traduciría también en un mayor peso en la Diputació de Barcelona y en el Área Metropolitana de Barcelona.
La apuesta de ERC por Rufián en Santa Coloma se unirá al segundo intento de Ernest Maragall de ser alcalde en Barcelona. En 2019, Maragall ganó las elecciones, pero un pacto de Barcelona en Comú y PSC con el aval de Manuel Valls se lo impidió.