El pueblo de la Costa Brava a una hora de Barcelona donde veraneó Kylie Minogue: aguas cristalinas y tesoros históricos

A poco más de una hora en coche desde Barcelona, en la provincia de Girona, se encuentra Tossa de Mar, un encantador pueblo costero que combina historia, naturaleza y playas de aguas cristalinas, convirtiéndose en un destino imprescindible para este verano.

Este rincón de la Costa Brava ha sido elegido por numerosas celebridades a lo largo de los años, desde la legendaria Ava Gardner hasta la icónica Kylie Minogue, lo que añade un toque de glamour a su encanto tradicional.

El pueblo costero con patios andaluces ideal para una escapada desde Barcelona: a una hora y con paisajes de película

Tossa de Mar destaca por su combinación única entre un patrimonio histórico excepcional y un entorno natural privilegiado.

Vistas de Tossa de Mar desde el castillo WIKIPEDIA

La muralla de su casco antiguo

Su casco antiguo amurallado, declarado monumento histórico-artístico nacional, transporta a los visitantes a otra época con sus calles empedradas, sus torres medievales y el castillo que domina el pueblo y ofrece vistas panorámicas al Mediterráneo.

Esta mezcla de historia y belleza natural hace que Tossa sea un lugar muy apreciado por turistas y vecinos que buscan desconectar del bullicio urbano.

La poza a menos de dos horas de Barcelona perfecta para una excursión de verano: frondosos bosques y caminos serpenteantes

Playas increíbles

Las costas de Tossa de Mar son uno de sus mayores tesoros. Entre ellas, la Cala Giverola se destaca por sus aguas transparentes y su entorno rodeado de acantilados y pinos, ideal para quienes buscan un espacio más tranquilo y auténtico donde disfrutar del sol y practicar deportes acuáticos.

Aunque el acceso no es tan sencillo, ya que la cala se encuentra en un complejo turístico y su llegada puede hacerse en coche o a pie por el Camino de Ronda, esta dificultad se recompensa con un paraje natural de gran belleza.

Cala Pola, en Tossa de Mar RRSS

Además, Tossa cuenta con más de una decena de playas y calas, como la playa de la Mar Menuda o la Cala Morisca, que ofrecen opciones para todos los gustos.

Casco urbano

Pero Tossa no es solo mar y playas. El pueblo ha sabido conservar su esencia marinera, reflejada en la vida cotidiana y en la arquitectura local, como el barrio de sa Roqueta, tradicionalmente habitado por pescadores.

Además, los visitantes pueden explorar lugares históricos como la capilla dels Socors o el santuario de Sant Grau, así como varios museos que guardan el legado cultural y artístico de la zona, incluyendo el Museo Municipal y el Museo de la Mujer.

Caminos para pasear

Los amantes de la naturaleza y las actividades al aire libre encontrarán en Tossa un paraíso para el senderismo. Varias rutas permiten recorrer la costa y las montañas circundantes, con miradores espectaculares como el de Sa Gavina, la plazoleta dedicada a Ava Gardner o el faro de Tossa.

Estas caminatas no solo regalan vistas impresionantes, sino también momentos de tranquilidad y conexión con la naturaleza, ideales para quienes desean escapar del estrés diario.

Cala Pola, en Tossa de Mar RRSS

Un rincón gastronómico

En cuanto a la gastronomía, Tossa de Mar ofrece una variada oferta culinaria que resalta los sabores del mar Mediterráneo. Sus restaurantes tradicionales y modernos invitan a degustar mariscos frescos, pescados y platos típicos catalanes, una experiencia imprescindible para completar cualquier visita.

Este verano, Tossa de Mar se presenta como una opción perfecta para viajeros que buscan playas de ensueño, historia, cultura y naturaleza a solo una hora de Barcelona. 

Es mucho más que una playa: es un refugio para quienes quieren disfrutar del verano con autenticidad, rodeados de belleza, tradición y el encanto que solo un lugar con tanta historia puede ofrecer. Sin duda, una joya escondida de la Costa Brava que merece ser descubierta.