Este jueves por la tarde, en la concentración de partidarios del independentismo ante el Parlamento de Cataluña para protestar contra el encarcelamiento de ocho exconsejeros de la Generalitat, encabezados por el exvicepresidente Oriol Junqueras, tomaron la palabra diversos dirigentes soberanistas. Entre ellos, Neus Munté, del DPeCAT; Alfred Bosch, líder municipal de ERC; Núria de Gispert, expresidenta del Parlament; Magda Casamitjana, de Moviment d’Esquerres (el partido cuyo embrión plantó Ernest Maragall); el diputado de la CUP Albert Botran; Elisenda Alemany, de Catalunya en Comú; y Albano Dante Fachín, líder de Podem.

En una ocasión como la de ese acto, no debería ser extraña la participación del líder de Podem en el palco de la concentración. Pero, en realidad, su presencia adquiere una dimensión que trasciende el protagonismo del partido que lidera Pablo Iglesias a nivel estatal: Fachín ya tiene un pie más fuera que dentro de Podemos. Es más, su futuro se atisba fuera de la formación que nació a raíz del 15-M, lo que dejaría el camino expedito a la alcaldesa Ada Colau para formalizar un frente de izquierdas no independentista de cara a las próximas elecciones autonómicas del 21 de diciembre.

El nuevo rumbo de Fachín viene marcado con las intensas reuniones y negociaciones que mantuvo durante los pasados días con el ya exvicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, uno de los hombres encarcelados este jueves por decisión de la jueza Carmen Lamela, de la Audiencia Nacional. Ambos políticos trataron de temas de política general, de la situación política catalana, de las elecciones del 21 de diciembre... y del futuro del propio Fachín.

Porque la carrera del hasta ahora líder de Podem está en el aire. De hecho, enfrentado a la dirección estatal, sabe que tiene los días contados al frente de la joven formación. “Le quedan dos telediarios, porque Iglesias ha forzado la celebración de una consulta a la militancia sobre los pactos electorales. Y seguramente, Fachín perderá ese pulso y tendrá que dimitir”, explican a Metrópoli Abierta fuentes de Podemos.

CREACIÓN DE UNA GESTORA

Este viernes, la plataforma Podem amb Futur, que ampara a varios círculos del partido morado en Cataluña, pidió al Consejo de Coordinación Estatal la convocatoria de una asamblea ciudadana extraordinaria en Podem para decidir “libremente el futuro político de nuestra organización respetando la línea política y principios fundamentales de Podemos”. Y remitió a Madrid la documentación necesaria para que la dirección estatal tome cartas en el asunto. Iglesias y los suyos ya han tomado nota y han obligado a consultar a las bases sobre las futuras coaliciones. Si los partidarios de ir en coalición con Ada Colau e ICV el próximo 21 de diciembre, Fachín tendrá que dimitir y se nombrará una gestora la próxima semana.

Un manifiesto de Podem amb Futur con motivo del 1 de octubre ya acusaba a la dirección de la formación de estar “a la deriva políticamente”. También denunciaba que el consejo ciudadano autonómico decidió participar en el referéndum “unilateralmente”. Asimismo, acusa a la dirección de “escasa transparencia” y de su negativa “a que las personas inscritas en Podem decidamos de forma definitiva y clara cómo afrontaremos estas elecciones.

”Se ha producido un goteo de dimisiones en el actual consejo ciudadano y se reemplazó este consejo por el Consjo de Coordinación, que de ninguna manera es un órgano de dirección contemplado enb los estatutos”. Los dimisionarios denunciaron que “no ha habido ni un informe ni rendición de cuentas de las casi 30 personas que actualmente cobran de Podem Cataluña. Tampoco están disponibles los informes de las cuentas anuales desde 2015, no se ha realizado a auditoría económica prometida y los gastos en personal se han disparado”. Tras el referéndum, los círculos critican especialmente el viraje político hacia el independentismo de su líder catalán, Y advierten: “Fachín tendrá que dimitir si los militantes no apuestan por su estrategia”.

UNA OFERTA IRRECHAZABLE

Lo cierto es que Junqueras, dispuesto a no perder comba, puso un caramelo en la boca de Albano dante Fachín: quiere ficharlo para incorporarlo en las listas de ERC. Con ello, hace una doble jugada: por un lado, trata de llegar a un segmento de votantes de la izquierda a los que Esquerra, como partido independentista netamente, no puede llegar. Por otro lado, quiere armar ruido alrededor de los comunes para llevarse una porción de sus votantes.

Dante Fachín

Dante Fachín

No es una jugada alambicada. De hecho, se veía venir, tras el constante coqueteo del líder de Podem con las tesis independentistas. ¿Porqué se empeñó Fachín en abrir conversaciones exclusivamente con el frente independentista dejando de lado a los comunes? Desde CeC lo tienen claro: “Se estaba labrando su futuro. Sabía desde hace tiempo que la dirección estatal del partido se la tenía jurada. No se hablaba con Iglesias y luego rompió con los comunes de Ada Colau. De ahí a echarse en brazos del independentismo sólo hay un paso”, explican las fuentes. El primer aviso de que sus días estaban contados le llegó hace unos meses, cuando Pablo Iglesias, de visita en Barcelona, prefirió asistir a un mitin de Ada Colau en vez de uno de Fachín. Ése fue el momento de la consumación de un divorcio anunciado.

BENEFICIOS PARA COLAU

Pero lo curioso son las consecuencias de la decisión de Junqueras de incorporarlo a su activo electoral: el republicano tiene como meta robar votos a su gran rival de la izquierda catalanista, pero en realidad ha puesto en bandeja a Ada Colau el pacto con la Podemos de Pablo Iglesias. Porque retirado Albano Dante Fachín de la cúpula de Podem, ya nada se interpondrá en la materialización del gran pacto de podemitas y comunes.

La incógnita es si el fichaje le es rentable a Junqueras y a Esquerra. “No parece que pueda arañar muchos votos en la izquierda, ya que el nombre de Fachín no es uno de los pesos pesados de este espectro político –explican fuentes de Catalunya en Comú (CeC), la formación de Ada Colau a este diario-. Puede ser que haga perder un puñado de votos, pero a buen seguro que esos votos nos entrarán por otro lado”.

Y no sólo eso: Podemos perdería votos en el resto de España si llega a alguna alianza con los independentistas. Con Fachín fuera de sus filas, ese peligro está conjurado. Por tanto, resaltan las fuentes consultadas tanto de Podemos como de CeC, “la izquierda sale ganando en Cataluña, con un mensaje claro de renovación”, pero sin caer en la red del independentismo o del nacionalismo identitario.

Noticias relacionadas