La concejal de la CUP en el Ayuntamiento de Barcelona, Eulàlia Reguant, ha reprochado al Gobierno municipal de BComú desalojar el conocido como 'mercado de la miseria' y "no dar soluciones a largo plazo" como encontrar un espacio seguro en el que los vendedores puedan vender y recibir ayudas de Servicios Sociales.
En declaraciones a la prensa, Reguant ha insistido que no se han abordado los problemas de fondo: "La solución ha sido policial, para evitar que la oposición siga haciendo presión y criminalizando el 'mercado de la miseria', y ha reclamado soluciones integrales que tengan en cuenta a los vendedores, a los vecinos y al centro cívico de La Farinera.
UN MÍNIMO DE SEGURIDAD
"El mercado de la miseria es una realidad desde hace muchos años", ha recordado Reguant, mientras que el número dos de la lista de la CUP a la Alcaldía, Jordi Magrinyà, ha pedido encontrar soluciones que pongan a los vendedores en el centro.
En este sentido, ha insistido en que las personas que acuden a este mercado están en una necesidad extrema y ha reclamado buscar un espacio para desarrollar esta actividad en la que tengan un mínimo de seguridad: "Que no sean represaliadas ni perseguidas".
ESTRATEGIA DE "EVITAR CONFLICTOS"
Magrinyà ha dicho que el desalojo ha sido motivado por la estrategia del Gobierno de Ada Colau de "evitar conflictos" con los grupos de la oposición, y ha advertido que el próximo Gobierno municipal deberá seguir abordando el problema porque no desparecerá sólo por expulsarlos de Glòries.