Los casos positivos de coronavirus en la Guardia Urbana muestran ya, desde hace unos días, una clara tendencia a la baja. Así queda patente en los datos del cuerpo policial a los que ha tenido acceso Metrópoli Abierta en exclusiva. El 19 de mayo, el último día que figura en el balance municipal, había 55 positivos.
Hasta 807 agentes han estado afectados por el coronavirus en una plantilla que ronda los 3.000 policías, es decir alrededor del 26,9%. Este martes, además de los 55 positivos, 570 ya eran situaciones resueltas y 182 guardias urbanos seguían confinados.
EL PICO, EL 24 DE ABRIL
Desde que se dio el primer caso en la Guardia Urbana, el pasado 17 de marzo, el número de agentes contagiados fue claramente al alza. El pico se alcanzó el pasado 24 de abril, con 170 positivos. Desde entonces, la cifra ha ido disminuyendo poco a poco.
El pasado 13 de mayo fue la primera vez, desde el 1 de abril, que los casos contagiados confirmados descendieron del centenar. Ese día había en el cuerpo 96 agentes diagnosticados. Ha sido la última semana en que los casos han bajado notablemente hasta los 55 actuales.
HASTA 411 POLICÍAS CONFINADOS
El número de confinados también se va reduciendo, aunque de forma más lenta. El número más elevado de policías que se tuvieron que quedar en casa se alcanzó el 29 de marzo, con 411. Desde ese día, ha sido el 18 de mayo la jornada con menos confinados, 179.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) se ha cansado de denunciar que entre los confinados hay agentes con síntomas de padecer la enfermedad. El sindicato también ha criticado que durante las primeras semanas de la crisis, los policías no disponían del material preventivo necesario.
Como avanzó en exclusiva este medio, CSIF ha denunciado ante la Fiscalía a la alcaldesa Ada Colau y a otros seis cargos municipales por la gestión de la pandemia. CSIF considera que estas personas podrían haber cometido un presunto delito contra los derechos de los trabajadores y un delito de lesiones.