La Guardia Urbana comprará caballos al Ejército español

El Ayuntamiento de Barcelona comprará caballos al Ejército español para la Unidad Montada de la Guardia Urbana. El consistorio y el Ministerio de Defensa firmarán un convenio de colaboración para la compra de animales de "pura raza española", según los datos que figuran en el texto aprobado en la comisión de gobierno [ver aquí, punto 52] del pasado jueves 13 de noviembre.

Fuentes oficiales municipales consultadas por Metrópoli Abierta informan que el convenio que se hará ahora es una continuación del ya existente (2014-2019) y a través del cual el Ayuntamiento puede adquirir caballos al Ministerio de Defensa. Cada año, el Gobierno central ofrecerá al consistorio entre dos y cuatro sementales, que la policía local barcelonesa podrá comprar o no. El coste de cada animal puede rondar los 5.000 euros.  

Convenio para la compra de caballos al Ejército español / AYUNTAMIENTO DE BCN

28 CABALLOS

Actualmente, en la unidad montada de la policía local barcelonesa hay 28 caballos y 38 agentes (según datos de 2019). Fuentes policiales explican que algunos de estos animales ya están a un paso de la jubilación y hay que renovarlos. Un caballo de estas características suele vivir entre 25 y 30 años y estar en servicio unos 15. Los equinos que pueden llegar a Barcelona desde el Ejército español forman parte de la "yeguada militar" que ya nutre a la Guardia Real y a otros cuerpos policiales.

Un portavoz del Ayuntamiento de Barcelona explica que la unidad montada “realiza tareas de proximidad y de prevención utilizando caballos”. El nuevo plan director de la policía barcelonesa vincula a esta unidad a “un patrullaje rural”, aunque los establos se encuentran junto al mar, en la calle de Wellington, muy cerca del Zoo.

"PATRULLAJE FORESTAL"

Según las mismas fuentes municipales, esta unidad puede actuar en zonas y caminos no accesibles para los vehículos a motor, reforzar el patrullaje forestal y de proximidad en zonas poco pobladas, “pero con mucha actividad de ocio”, y llevar a cabo el control y la inspección administrativa en aspectos relacionados con el medio ambiente.

Caballos de la Guardia Urbana durante una exhibición / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA

Los propios agentes de la unidad explican en las distintas jornadas de puertas abiertas, que organizan a lo largo del año, algunas de sus funciones cotidianas. Una parte del tiempo se dedica al cuidado y al entrenamiento de los caballos. Los policías también patrullan por los barrios –lo que en muchas ocasiones obliga a utilizar remolques para el traslado de los caballos-, participan en desfiles y actos protocolarios de la ciudad e imparten talleres, especialmente en colegios.

LA UNIDAD MÁS ANTIGUA DE LA GUARDIA URBANA

La unidad montada es la más antigua del cuerpo policial barcelonés. Nació en 1856, cuando la ciudad tenía como alcalde a Francesc Permanyer, y solo hacía 13 años que se había creado la Guardia Urbana. En sus inicios, las tareas de estos jinetes fueron vigilar las murallas de la ciudad y prevenir delitos y peleas. La unidad es una de las más prestigiosas de toda Europa.

El año pasado, Metrópoli Abierta se hizo eco de la denuncia del Sindicato de Agentes de Policías Locales. Según SAPOL, la unidad montada se encontraba en una situación precaria, hasta el punto de que se había llegado a reducir las raciones de comida a los animales. Oficialmente, nadie se ha propuesto disolver la unidad, aunque el inmovilismo hace tiempo que acompaña a esta unidad.

SIN APENAS DESFILES NI ACTOS

Ya desde antes de la pandemia, la presencia en actos y desfiles internacionales es mínima y a finales de 2019 el cuerpo llevaba tiempo sin comprar animales, indicó entonces a este medio el secretario general de SAPOL, Manel Garcia. Los elevados costes económicos son el principal motivo.