Colau y ERC se alían por el espionaje político y vislumbran un pacto postelectoral

El espionaje a políticos catalanes, un caso conocido como el Catalangate, ha unido a Barcelona en Comú y a ERC, dos partidos con muchos vasos comunicantes que ya vislumbran un pacto tras las elecciones municipales de mayo de 2023. Así lo ha explicado este viernes Metrópoli. En el PSC existe el temor de que se ganen las elecciones y no puedan gobernar por un acuerdo entre republicanos y comunes.

Ada Colau y Ernest Maragall han convocado un pleno extraordinario, con contenido de declaración constitucional. La proposición ha salido adelante con los votos a favor de los republicanos, comunes y JuntsxCat, 25 de los 41 concejales del Ayuntamiento. Colau ha dejado, una vez más, de lado a su socio de gobierno, el PSC. El resto de grupos, incluidos los socialistas, han votado en contra: Ciutadans, PP, Valents y la regidora no adscrita Marilén Barceló.

El texto aprobado por el Ayuntamiento condena "el espionaje político que supone una flagrante vulneración de los derechos humanos" y manifiesta su apoyo y solidaridad a las 65 personas que fueron espiadas. Y reclama al gobierno del Estado que investigue con la máxima celeridad y transparencia el caso, dé las explicaciones necesarias y "asuma las responsabilidades a todos los niveles pertinentes".

ESCÁNDALO DEMOCRÁTICO, SEGÚN MARAGALL

El líder de ERC, Ernest Maragall, ha calificado el Catalangate como un escándalo democrático y una "vulneración flagrante de derechos". Maragall ha acusado al Estado de espiar a dos concejales del Ayuntamiento -él mismo y Elsa Artadi- y  ha preguntado por qué y quién les espió a dos candidatos a la alcaldía y si los comicios municipales de 2019 estuvieron intervenidos.

Retrato de Elsa Artadi tras la entrevista con Metropoli / LUIS MIGUEL AÑÓN (MA)

Desde Barcelona en Comú, el concejal Jordi Martí Grau, ha dicho que en ningún caso se puede espiar a los adversarios políticos y ha tildado el Catalangate como "una persecución ideológica" y ha exigido "transparencia absoluta y asunción de responsabilidades".

ARTADI: "SOY INDEPENDENTISTA, NO TERRORISTA"

Artadi ha reconocido que ella es "independentista pero que no es terrorista". La líder de Junts ha catalogado la intervención telefónica a los líderes secesionistas como "el mayor escándalo de espionaje en la Europa el siglo XXI". Artadi ha acusado al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, de ser el máximo responsable del citado caso de espionaje ilegal. 

El PSC no ha apoyado la proposición. Los socialistas habían presentado una iniciativa sobre el espionaje político que se tenía que debatir en el pleno ordinario. Sin embargo, la han retirado para que el tiempo se pueda dedicar a debatir temas sobre la ciudad. La teniente de alcaldía Laia Bonet ha recordado que el líder del PSC, Salvador Illa, ha pedido una investigación del caso y ha condenado "todo tipo de espionaje que pueda suponer una vulneración de derechos".

Para Bonet, la investigación se tiene que llevar a cabo en el seno de la comisión de secretos oficiales. El texto retirado del PSC defendía "el compromiso democrático de defender los derechos y las libertades de la ciudadanía y de que se respeten los tratados y los convenios internacionales para la protección de los derechos humanos, civiles y políticos". Y abogaba por retomar el camino del diálogo para solucionar los problemas de Cataluña con España.

Eva Parera durante la entrevista con Metrópoli / LUIS MIGUEL AÑÓN

PARERA DEFIENDE QUE USE EL ESPIONAJE PARA DEFENDER EL ESTADO DE DERECHO

Los partidos de centroderecha constitucionalista han cargado con fuerza contra la proposición de ERC y los comunes. Especialmente dura ha sido la regidora de Valents, Eva Parera. "Ha tildado el pleno de un gran ejercicio de cinismo e hipocresía". Y ha considerado que los independentistas utilizaron las instituciones catalanas para cargarse el Estado de derecho y hacer un referéndum ilegal. "Los Estados de derecho también se defienden con los servicios de inteligencia. Tienen que controlar a los que quieren hacer un golpe de Estado".  

Ciutadans, en voz de su presidenta Mariluz Guilarte, ha valorado el pleno extraordinario de "vodevil", y ha acusado a Barcelona en Comú y ERC de ser dos partidos con una línea "cada vez más fina". "Nos cuesta diferenciarlos". Para Guilarte, los plenos extraordinarios se tienen que convocar para hablar de temas de ciudad, como el incivismo, la inseguridad, la limpieza o la movilidad. "Y la biimputación de la alcaldesa. Eso si merecería un pleno extraordinario", ha subrayado la líder naranja. "Este pleno [el del espionaje a los líderes independentistas] es una historia de Mortadelo y Filemón".

Josep Bou, en un carril bici de Gran Via / METRÓPOLI - LUIS MIGUEL AÑÓN

En opinión del presidente del PP, Josep Bou, ninguna persona tiene que ser víctima de una persecución por sus ideas. Ahora bien, Bou ha querido diferenciar entre las ideas y las acciones. El empresario ha acusado a los independentistas de querer hacer una "fractura ilegal" del Estado con el procés independentista, un "acto punitivo".