Más de 18 millones de euros es lo que la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha reservado para las campañas propagandísticas que han de hacerse los dos próximos años. Se trata del acuerdo marco en el que se fijan condiciones para “la contratación de los servicios de asesoramiento estratégico, planificación, negociación y gestión de espacios publicitarios en todos los medios y soportes y, secundariamente, los servicios de ideación, creatividad, diseño, producción e implementación de acciones especiales de comunicación vinculadas a las campañas de publicidad”.
La reserva adquiere una mayor relevancia si tenemos en cuenta que estas campañas se realizan a mayor gloria del equipo municipal que controla los resortes del Ayuntamiento y que falta menos de un año para las elecciones municipales. Hay dos clases de campañas de publicidad que hará el Ayuntamiento en el futuro próximo: por un lado, están las campañas multimedia, que son las difundidas a través de televisión, prensa impresa, revistas, radio, medios digitales o vallas exteriores. La publicidad exterior se posiciona en metro, autobuses, Ferrocarrils de la Generalitat, aeropuerto, tranvía, centros comerciales, mobiliario urbano, taxis y cines. Por otro lado, están las “campañas digitales”, dirigidas específicamente a medios, soportes y dispositivos digitales. Ambos tipos de campaña se gestionan por separado: las digitales se introducen en redes sociales: Facebook, Twitter, Linkedin, Youtube, Instagram, TikTok, Spotify y Google.
LA IMPRESCINDIBLE CARAT ESPAÑA
Hace unos días, el Ayuntamiento ya escogió a las empresas que se encargarán de cada una de las acciones publicitarias. Para las campañas multimedia, se han reservado 17.270.055 euros y en ellas participarán tres firmas: Carat España, una de las veteranas del espectro publicitario, y dos uniones temporales de empresas. La primera está formada por Medialog Communications y por Infinity Media Communications; la segunda, por ITAN y por Gesmedia Consulting. Según consta en un informe interno municipal, las tres ofertas presentaron justificaciones aludiendo a que por el volumen de negocio que manejan tiene una gran capacidad de negociación ante los medios y ello les permite obtener precios muy competitivos a la hora de introducir publicidad en los mismos.
Fotomontaje de Ada Colau y el perfil de los comunes en TikTok, su apuesta para llegar al público joven / METRÓPOLI
La veterana Carat España tiene su sede en Madrid y su nombre se hizo popular cuando acogió en su cúpula al exdirigente del PP Miguel Ángel Rodríguez, actualmente jefe de gabinete de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. Carat, con casi medio siglo de existencia, está presidida por André Camarinha Freire de Andrade. Su CEO actual es Rafael Urbano, que desde 2014 hasta mayo de 2022 fue el máximo responsable de la firma Ymedia y, anteriormente, estuvo 10 años como director general de Havas Media.
ESPECIALISTAS EN MARCAS
Medialog Communications, por su parte, es una empresa barcelonesa creada en el otoño de 2016 y administrada por Áurea Gómez y por Philipp Fürst, mientras que su socia en la UTE, Infinity Media, es una firma englobada dentro del grupo Zertem (que también opera con Equmedia, Ingenio Media o Zosmamedia). Infinity está presidida por Alberto Gost y su CEO es Enrique de la Torre. Las dos empresas asociadas están especializadas en el tratamiento de marcas y en actividades de rentabilización de las mismas.
Por lo que respecta a la otra unión temporal de empresas, ITAN Media es una compañía creada en 2018, propiedad de Ferran Burriel, propietario al mismo tiempo de Nothingad Comunicació y de otras empresas, como Equivea Health o Lanzame Capital. Gesmedia Consulting es una agencia de publicidad madrileña que presume de que convierte la publicidad en ventas y de que “negociamos siempre por debajo de pool”. Es una empresa administrada por Laura Martín Vergara. Su propietaria es la firma Sanza Inversiones, une empresa controlada por Pedro Luis Marijuan.
Campaña de la superilla de Horta / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA
PERDONÓ 80.000 EUROS A LA GENERALITAT
En lo que respecta a las campañas digitales, el pastel se reducirá a sólo 905.55 euros, que se repartirán entre las firmas Nothingad Comunicació y ADSplanning. La primera de ellas es de Ferran Burriel. Esta empresa fue una de las que se puso al servicio del gobierno de la Generalitat para realizar las campañas del referéndum de independencia del 1 de octubre de 2017. Tras las actuaciones judiciales contra la organización de la consulta, y para evitar que se le pudiera acusar de malversación de caudales (el referéndum fue prohibido por el Tribunal Constitucional y, por tanto, era ilegal y no se podía destinar dinero público a su promoción), el empresario renunció a cobrar 80.000 euros de las campañas que le habían encargado desde Presidencia. Además, al renunciar a cobrar, tampoco se pudo acusar a los altos cargos del Govern de malversar ese dinero. Así lo declaró ante el Tribunal Supremo, aunque en los años siguientes recibió millones de euros en encargos de la Generalitat.
Adsplanning, por su parte, es una agencia de publicidad creada en 2016 por José Antonio González de Pedro, un ejecutivo que también administra las sociedades Anuncios Nativos y Reliance Investments.