El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni / EFE

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni / EFE

Información municipal

Collboni quiere marcar su mandato sin decidir todavía su socio de gobierno

Los comunes, Junts y el PP reclaman al alcalde socialista que defina con quién desea gobernar, abiertos a un pacto que el PSC quiere demorar

30 julio, 2023 23:30

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Los comentarios van todos en la misma dirección. Los concejales del PSC en el Ayuntamiento de Barcelona quieren tomárselo con cierta calma. Y el primero es el propio alcalde, Jaume Collboni, que admite el problema que supone gobernar sólo con diez concejales. “No es lo óptimo”, señaló en el pleno de este viernes, pero lo que realmente desea el alcalde socialista es marcar el mandato, configurar un nuevo marco que deje claro que ha habido un cambio en Barcelona. Y señalar, con ello, un camino que no se pueda revertir. ¿Un socio? Para más adelante.

La elección del ex convergente Santi Vila como presidente del comité asesor de infraestructuras es ilustrativo. Son amigos, pero lo decisivo es que Vila puede ofrecer un discurso que va en la línea de los socialistas catalanes: crecimiento económico, sostenible, pero sin perder oportunidades. Eso se ejemplifica en la necesidad de ampliar el aeropuerto de El Prat. Si llega un acuerdo con los comunes, éstos deberán saber qué camino se ha decidido.

Otra cuestión crucial es afrontar de cara el tema de la seguridad en la ciudad. Hay problemas. Los delitos han crecido y así lo señaló el teniente de alcalde, Albert Batlle. Asumirlo, sin subterfugios, es el primer paso, considera el PSC, para poder resolver el problema, con más agentes de la Guardia Urbana y con más políticas cívicas, un empeño personal de Jaume Collboni.

La pretensión es aguantar un tiempo en solitario para marcar ese perfil, y dejar constancia, al posible socio, de cómo quiere gobernar Collboni. La estructura, señalan fuentes socialistas, “está pensada para gobernar desde el primer momento”. Con cuatro tenientes de alcalde, con la aprobación ya del cartapacio municipal, y con ocho comisionados para las distintas áreas de gestión, Collboni no tiene prisa.

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, en el Ayuntamiento / EP

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, en el Ayuntamiento / EP

El escenario de la política española es importante, aunque no decisivo. Collboni aseguró en el pleno del viernes que el PSC ha dejado claro que quiere gobernar en clave “progresista”, con lo que todo está preparado para que ese socio sea el partido de Ada Colau, los comunes. Pero también precisó Collboni que los acuerdos se hacen “entre todos, también con los que son diferentes”, lo que abre la puerta a Junts per Catalunya.

Esa dualidad es la que irrita a Ada Colau, que cargó contra Collboni, al señalar que no jugará entre dos bandos, y que no se puede, a su juicio, practicar las dos cosas; “aliarse con una fuerza progresista e impulsar políticas liberales con otra”, en alusión al partido de Xavier Trias.

El hecho es que a Collboni le podrían ahora llover las ofertas. El propio Trias reclamó al alcalde que se decida, y que puede “rectificar”, en alusión a un posible pacto con JxCat. En Trias no hay rencor por lo sucedido, por el acuerdo que le dejó sin la alcaldía. Lo que reclama es que se produzca esa aproximación con los socialistas. Y el problema lo tendrá su propio partido si esa opción, al final, pudiera ser posible.

El líder de Junts en Barcelona, Xavier Trias, junto al alcalde Jaume Collboni durante el pleno de investidura / EFE

El líder de Junts en Barcelona, Xavier Trias, junto al alcalde Jaume Collboni durante el pleno de investidura / EFE

El otro posible socio es el PP de Daniel Sirera. Lejos del reproche por un posible acuerdo con los comunes, Sirera se expresó con claridad el pasado viernes en el pleno municipal. La idea de Sirera es que Collboni cuente con el PP, aunque tenga la relación que pueda tener con los comunes. Es decir, ya no es una exigencia que deje de lado al partido de Colau. Y los cuatro concejales del PP serían decisivos en negociaciones como, por ejemplo, los presupuestos.

¿Y ERNEST MARAGALL?

El partido que parece fuera de esos pactos, por ahora, es Esquerra Republicana. El republicano Ernest Maragall reprochó los primeros pasos del alcalde Collboni. Y no se ha prestado, por ahora, a un posible acuerdo para garantizar el mandato del alcalde socialista. Pero su partido ha tomado una decisión importante: participar en el gobierno de la Diputación de Barcelona, con el PSC. Y negocia la investidura de Pedro Sánchez en el Congreso.

Ante esos diferentes escenarios, Collboni ha decidido esperar y gobernar en solitario, siendo muy consciente de que “no es lo óptimo”.