El Gobierno ha aprobado este lunes los cambios para el uso del transporte ferroviario gratuito en la modalidad de Media Distancia. El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha anunciado que Renfe tomará medidas sancionadoras contra aquellos usuarios que no utilicen correctamente el servicio, que pasó a ser gratuito el pasado mes de septiembre y seguirá siéndolo durante el próximo 2023.
El protocolo de actuación, que ya ha sido aprobado y publicado en el BOE, contempla que Renfe enviará hasta dos avisos a los titulares cuando, tras haber hecho reservas en los trenes, se registre que no han llegado a usar el servicio y que no lo han cancelado con la antelación requerida. Tras los dos avisos, la operadora pública estatal retirará el abono y la fianza del billete.
No obstante, la operadora ferroviaria notificará con siete días de antelación antes de que el billete sea finalmente invalidado. La medida comenzará a aplicarse a partir del próximo 7 de diciembre.
PLAZAS SIN RESERVA
Para no sufrir la sanción, los viajeros que hayan reservado un viaje y no lo vayan a coger tendrán que cancelar la plaza con un mínimo de dos horas de antelación. En caso contrario -y habiendo incumplido esta norma en tres ocasiones- se incautará la fianza de 20 euros depositada y se anulará el billete. Los clientes sancionados no podrán, además, comprar ningún otro billete por el plazo de 30 días.
Además, solo se podrán hacer cuatro viajes diarios de ida o vuelta por abono y se triplicará el tiempo que tiene que pasar entre un viaje y otro si tienen el mismo sentido.
En el caso de los trayectos con alta demanda, Renfe podrá reservar hasta un 10% de las plazas para otorgarlas sin reserva previa. En estos casos, no estará disponible la selección de asiento. Finalmente, a partir del 1 de enero los menores sin DNI podrán adquirir un billete especial.