José María Cardellach: "A España le interesa mucho una Gran Barcelona que impulse la economía y la cultura"
El abogado, presidente de la asociación Barcelona Distrito Federal, defiende que la AMB refuerce sus competencias y que, con la posible presidencia de Salvador Illa en la Generalitat, se relance el hecho metropolitano
25 mayo, 2024 23:30José María Cardellach mantiene una actividad frenética. Abogado, tiene claro que debe participar en los grandes debates de la sociedad catalana y de Barcelona en particular. Es miembro de la Junta del Círculo Ecuestre, y vicepresidente del Real Club de Polo de Barcelona. Pero ha puesto su atención, también, en el área metropolitana de Barcelona y en la necesidad de que cobre una proyección mayor, más útil y eficaz. Esa labor la ejerce Cardellach desde la presidencia de la asociación Barcelona Distrito Federal, que tiene un carácter transversal y que desea impulsar el debate sobre cómo impulsar más y mejor la llamada Gran Barcelona. En esta entrevista con Metrópoli, el abogado tiene claro que se debería “aprovechar” la actual coyuntura política, con los ayuntamientos, el Govern de la Generalitat, los organismos supramunicipales y el propio Gobierno central remando en una misma dirección: “A España le interesa mucho una Gran Barcelona que impulse la economía y la cultura”, sostiene.
El área metropolitana de Barcelona se ha situado en el centro de los grandes debates sociales y económicos. La demanda de más vivienda, tanto de protección oficial como de régimen libre, la necesidad de un transporte público más ágil y sin permanentes molestias para los usuarios, o la petición por parte de las empresas de retener el talento y de atraer nuevo talento internacional sólo puede pasar, entiende Cardellach, por “una mayor coordinación metropolitana”. La entidad que preside ha elaborado informes y ha presentado trabajos en esa dirección, aunque todavía en ámbitos restringidos o sin la proyección que hubiera deseado.
¿Qué está en juego? “Barcelona debe jugar con otras metrópolis, en una interlocución constante. Ha jugado, históricamente, ese papel, pero también en oposición a otro proyecto distinto. Podríamos decir que ha sido una dualidad entre lo que puso sobre la mesa Pasqual Maragall y, por otro lado, Jordi Pujol. Pero ahora se trata de hacer algo distinto, y, de hecho, más ambicioso, se trata de dar un salto, porque esa será la mejor manera de vender Barcelona. El tamaño es importante para el progreso económico y también cultural. No olvidemos esa dimensión cultural”, insiste este abogado.
La construcción de vivienda, urgente
Sin embargo, aunque el diagnóstico puede ser compartido, con otros organismos también centrados en el área metropolitana, como Foment del Treball, que lleva años apostando por la Gran Barcelona, con las conferencias y trabajos bajo la coordinación de Rethink Barcelona, la pregunta que surge es cómo se debe dar ese salto. Cardellach considera que una de las fórmulas para por el AMB, el Área Metropolitana de Barcelona, que preside el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni. “El AMB puede ser la columna vertebral de ese proyecto, con más competencias, o con una mayor coordinación y ambición”, señala. Lo prioritario, a su juicio, es que “se facilite una mayor interconexión, que se facilite esa movilidad para el trabajo y el ocio y que se piense de verdad en proyectos distintos a lo que se ha hecho hasta ahora y que no ha funcionado”.
El presidente de Barcelona Distrito Federal se refiere a la normativa que se impuso en el anterior mandato, con la reserva en Barcelona del 30% de vivienda protegida en las promociones inmobiliarias. “La construcción de vivienda, que es una cuestión urgente, debe plantearse en toda el área metropolitana, y sin esas restricciones y con una colaboración clara entre el sector público y el privado. No se puede forzar a los promotores”, remacha Cardellach.
Pero, ¿cómo se consigue todo ello? Lo más decisivo, ahora, para este abogado, es lograr “el consenso político, porque lo que se plantea debería interpelar a todos, desde los ayuntamientos, las diputaciones y los diferentes gobiernos, el autonómico y el estatal”.
Una de las claves, para Cardellach, es que los propios municipios asuman que sus equipamientos deben servir para el conjunto del área metropolitana. Pone como ejemplo los espacios empresariales que existen, pero que, en muchas ocasiones, se consideran como algo único de un determinado ayuntamiento. Cita la Fira de Cornellà, con un Palacio de Congresos, y otros muchos equipamientos locales que se podrían aprovechar con más ambición: “Lo que debemos crear ahora es economías de escala, con sinergias que nos beneficien a todos, y pensando en una Gran Barcelona que es, pero que debe ser mucho más potente”.
Los empresarios, el mundo que conoce bien Cardellach, pero también profesionales liberales, como él mismo, se han fijado, sin embargo, en un problema importante. “Ha habido una cerrazón por parte de Barcelona. La conexión con la ciudad es menor, y de ello se resiente la actividad comercial. Las trabas para acceder a la ciudad se podrían entender, pero el hecho es que no hay conciencia de la importancia de ese flujo que llega a Barcelona, del área metropolitana, pero del conjunto de comarcas de Catalunya, y que desea comprar y acceder a servicios profesionales y de ocio”.
Otra de las consideraciones de Cardellach es que “las policías locales deberían participar en las Juntas de Seguridad”, y que esa coordinación entre cuerpos de seguridad debería ser mayor para atajar un problema cada vez más acuciante: el de los robos, atracos y diversos incidentes violentos.
¿Se da ahora una coyuntura favorable para todos esos cambios que refuercen el área metropolitana? José María Cardellach considera que “puede ayudar”. El posible acceso del socialista Salvador Illa a la presidencia de la Generalitat “Illa puede tener un efecto positivo, porque, además, se podrá interrelacionar con esa Gran Barcelona y con el Gobierno central”.
¿Un superalcalde de la Gran Barcelona?
Entonces, ¿sólo salen adelante las cosas cuando hay un mismo color político en distintas administraciones? “No debería ser así, pero es evidente que eso ahora puede ayudar”, incide este abogado, que añade lo que se percibe desde fuera: “A España le interesa mucho una Gran Barcelona que impulse la economía y la cultura, y me refiero especialmente a la cultura, porque creo que tiene un enorme potencial. Debe haber diversos polos de atracción en toda España, y Barcelona ocupa un papel primordial, y toda su región metropolitana”, remacha el presidente de Barcelona Distrito Federal.
Pero, ¿y la elección de un superalcalde? La idea se debate en distintos foros, con la mirada puesta en la experiencia del Gran Londres, que cuenta con esa figura institucional. “Quizá lo primero es reforzar las competencias del AMB, pero no niego que esa idea pueda ser interesante, que un representante agrupe a toda esa Gran Barcelona. Porque lo que hace falta es que se tomen decisiones, que alguien las asuma y las lidere”, señala Cardellach.
Como uno elemento central del debate aparece la ampliación del aeropuerto de El Prat. Aquí Cardellach no tiene dudas. Es partidario de llevarla a cabo. “No creo que se pueda optar, porque la conexión con el mundo, las conexiones directas de largo alcance, son más necesarias que nunca para poder competir. Y creo que eso puede ser compatible con el respeto por el medio ambiente, que es evidente que debemos cuidar”.
Lo que se dirime en los próximos años, a juicio de Cardellach, es una dualidad entre una Catalunya del “no”, que se ha cerrado en los últimos años, y una Gran Barcelona que “desea impulsarse, que apuesta por el ‘sí’ a muchos proyectos”.