Meses sin dormir: el ruido de las obras del AVE pone al límite a los vecinos de Sant Andreu
Los técnicos de Adif trabajan hasta altas horas de la madrugada, por lo que habitantes de Sant Andreu llevan meses sin pegar ojo
21 septiembre, 2022 00:00Noticias relacionadas
Los vecinos de Sant Andreu de Palomar no pueden dormir. A lo largo de todo el verano han sufrido los estragos del ruido, que les ha impedido hacer vida con normalidad y procurarse un mínimo descanso. Y es que las obras de construcción de las nuevas vías del AVE y la estación Sagrera - Sant Andreu no dan tregua. Tampoco van a darla próximamente.
Según han relatado fuentes vecinales a Metrópoli, todo comenzó entre mediados y finales de junio cuando, en el tramo de vías aledaño a la calle de Josep Soldevila, comenzaron a escuchar ruido a altas horas de la noche. Provenía de la zona en obras del AVE. Al principio, solo era una molestia. "Pensaba que se trataría de algo que duraría unas semanas, y es algo que se puede pagar porque tapen las vías", relata un vecino que vive por la zona.
No obstante, la situación se enquistó. Cada noche durante todo el verano los obreros de las vías han continuado con su trabajo. Gritos, arrastre de vía metálicas, taladros agujereando los muros de hormigón, sierras eléctricas cortando metal y un generador de gasolina son solo algunos de los instrumentos que se escuchan cada noche en esta particular canción de cuna que suena entre las 23:00 horas hasta las 5:00 de la mañana. Luego, los trabajos se reanudan hacia las 6:30 horas. A partir de las 7:00 horas comienzan los trabajos con maquinaria pesada, como camiones de carga y descarga o sierras metálicas, detalla uno de los damnificados.
Los vecinos explican que ante esto, lo único que han podido hacer es cerrar las ventanas en lo que ha sido uno de los veranos más calurosos desde que se tienen registros. O cocerse y no poder dormir por el calor o abrir y no poder dormir por el ruido. Así todos los días desde mediados de junio.
LOS BOTELLONES, EL RELEVO DE LAS OBRAS
"Esto es así de lunes a jueves", relata el vecino de la zona que añade que, viernes y sábado, el ruido de las obras lo sustituyen los botellones. Y es que las vías en construcción se sitúan, actualmente, muy cerca de las cocheras de TMB y un gran aparcamiento, lugar común de reunión de jóvenes del barrio.
EL AYUNTAMIENTO, INEFICAZ E INCAPAZ DE PARAR EL RUIDO
En julio, y al ver que las obras no iban a tener fin un momento próximo, un vecino del barrio emitió una queja al Ayuntamiento solicitando que se minimizara el ruido o se paralizaran las obras por la noche para favorecer el descanso de los vecinos. Recibió respuesta dos días después: las obras continuarían y desde el consistorio no podían hacer más que trasladarle la queja a Adif.
En el escrito del gobierno municipal, detallan que el terreno en obras, es decir, la zona de vías, es propiedad de la empresa pública y que, en términos legales, puede hacer obras cuando y como crea conveniente, de acuerdo con la Ley Ferroviaria. La Guardia Urbana tampoco pudo hacer nada cuando los vecinos llamaron.
Al término de este artículo, el Ayuntamiento no ha dado respuesta a las preguntas formuladas por Metrópoli.
HERRAMIENTAS POLÍTICAS
En conversación con este medio, la regidora de Serveis Urbans de Junts per Catalunya, Francina Vila, ha considerado que hay una normativa municipal que, efectivamente, se está incumpliendo y que, aunque Adif tenga libertad sobre cuando hacer obras, no se puede obviar el descanso de los vecinos. "Todo pasa por que el gobierno municipal haga una inspección en las obras e investigue si son adecuados los horarios y los decibelios del ruido de las obras", recomienda. En caso de no serlo, "el consistorio dispone de instrumentos políticos de negociación", explica, como hablar con Adif y llegar a un acuerdo o ponerse en contacto con el Ministerio de Transportes.
En este sentido, ha ponderado que por mucho que haya una Ley que permita a Adif trabajar a estas horas, la responsabilidad de hacer cumplir la normativa municipal recae sobre el gobierno de la ciudad, ha reflexionado.
Asimismo, advierte que el cumplimiento de la normativa municipal sobre el ruido es una de las principales debilidades del gobierno de la actual alcaldesa, Ada Colau.
ADIF AVISA: SE INTENSIFICARÁN LOS TRABAJOS
En respuesta a las preguntas formuladas por Metrópoli, Adif ha confirmado que los trabajos no solo continuarán hasta septiembre, sino que se intensificarán, lo que "puede conllevar nuevas molestias de ruido en horario nocturno" para los vecinos. Aseguran lamentar dichas molestias, pero consideran que, como parte de las obras son las de tapado de las vías, una vez culminadas las obras redundará en un beneficio para los vecinos, pues se "reducirá las molestias generadas por el propio tráfico de trenes".
También han explicado que, para evitar interrumpir el tráfico ferroviario de la R1, R2, R2 nord y R11, se ven obligados a llevar las obras en horario nocturno y que tanto la administración como los vecinos fueron previamente avisados "mediante cartelería, medios de comunicación y redes sociales".
La zona de vías ferroviarias de Sant Andreu está muy cerca de calles a lo largo de todo el barrio. Por el momento, el núcleo de las obras está al lado de la calle de Josep Soldevila, pero los próximos tramos pasan por calles, si cabe, más largas y más pobladas, como es el caso de la calle de Fernando Pesoa. Adif planea continuar adelante con su proyecto sin importar el ruido, por lo que es de esperar que, lo que hoy afecta a esta calle, pueda afectar a más vecinos en el futuro.
OBRAS HASTA DICIEMBRE
Las obras de construcción de la nueva línea del AVE y la estación de Sagrera-Sant Andreu están lejos de terminar. Renfe está repartiendo folletos informativos en los que avisa de cortes en las líneas R1, R2 nord y R11 entre las estaciones de Montcada i Reixac y Passeig de Gràcia, justo la línea de tren que pasa por la zona en obras.
Los trabajos, según el Ministerio de Transportes, llegarán a aunar a más de 600 empleados entre septiembre y diciembre de forma simultánea. En ese plazo se espera terminar la estación, tapar las vías y modificar la estructura ferroviaria de Renfe para integrar las líneas de Barcelona, Granollers y Portbou. Tanto el Ayuntamiento como Adif han detallado en sendas comunicaciones que las obras se encuentran en un momento de "gran complejidad".
EL RUIDO, UN PELIGRO PARA LA SALUD
La exposición a la contaminación acústica supone un problema de salud que es, de hecho, según la Agencia Europa del Medio Ambiente (AEMA), causa al año 16.600 muertes prematuras y más de 72.000 hospitalizaciones en el viejo continente. Esta causa ambiental puede ocasionar desde pérdidas auditivas crónicas hasta ser un desencadenante o potenciador de enfermedades cardiovasculares.
Además, afecta al descanso y al sueño. En este sentido, el ruido puede ser un motor para accidentes derivados de la falta de concentración provocados por un mal descanso, como accidentes laborales y de tráfico.