Una imagen de la discoteca Merlin en su 30 aniversario

Una imagen de la discoteca Merlin en su 30 aniversario DISCOTECA MERLIN

Sant Martí

Una discoteca con más de 30 años de historia se despide de Barcelona para siempre: empieza su derribo

Sus tres socios bajaron la persiana porque la propiedad no quiso renovarles el contrato

13 febrero, 2024 13:43

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Una discoteca con más de 30 años de historia se despide de Barcelona para siempre. Se trata de la mítica sala Merlin, ubicada en el Parc i la Llacuna del Poblenou, en el número 142 de la calle de Àvila. Este local de ocio nocturno cerró sus puertas hace poco más de un año y ha sido esta semana cuando ha empezado su derribo, poniendo punto y final a una de las salas más emblemáticas del distrito.

La discoteca Merlin desaparece de Barcelona 

La discoteca Merlin no era una sala como cualquier otra. Su espectacular decoración, al más puro estilo medieval, era uno de sus puntos fuertes que, sumado a los temazos del DJ García, eran parte de la clave del éxito. Tanto su exterior como su interior era una discoteca-castillo en medio de la calle de Àvila, por el que han pasado unos dos millones de clientes, según cálculos de sus propietarios.

La discoteca Merlin durante una celebración de Halloween

La discoteca Merlin durante una celebración de Halloween DISCOTECA MERLIN

La sala Merlin aterrizó en la capital catalana hace poco más de 30 años. El 15 de mayo de 1992 fue el día de la inauguración y, desde entonces, se ha convertido en uno de los lugares de referencia en el ocio nocturno barcelonés.

Dos millones de clientes en 30 años

Merlin se va, pero se queda en la memoria de los miles de personas que han tenido la oportunidad de visitar este espectacular castillo-discoteca. "Os damos gracias, gracias y millones de gracias. Dentro de poco tiempo pasaremos a formar parte de vuestros recuerdos de juventud, que permanecerán en vuestra memoria. Os queremos. Hasta siempre", decían los tres propietarios en un comunicado anunciando el cierre en enero del año pasado. 

Tras el derribo se prevé que se levante un edificio nuevo, cuyo uso aún se desconoce. Los antiguos dueños de la discoteca denunciaron que habían sido víctimas de la presión inmobiliaria cuando los echaron del lugar.