La America's Cup Experience se echa atrás. La visita al centro de divulgación de la Copa América de vela contaba hasta ahora con una experiencia gratuita, denominada Free Experience, en la que se explicaban los fundamentos de la competición, los equipos, los barcos y la importancia de la tecnología en la regata. Ahora, tras poco más de un mes de funcionamiento, ha pasado a ser de pago, igual que el resto del espacio.

De esta forma, la exposición tendrá un precio de 15 euros para el público general, con un precio reducido de 12 euros y un pack familiar para cuatro personas de 48 euros. También es posible adentrarse en un simulador inmersivo, con gafas de realidad virtual, lo que tiene un precio de 8 euros. Para completar la visita hay una experiencia gastronómica de la mano del chef Albert Ventura y la apertura de Vraba Restaurant. 

VISITANTES E INVERSIÓN

Desde la America's Cup Experience aseguran que esta modificación se debe a que la Free Experience sólo se podía disfrutar hasta el 11 de octubre, aunque en un primer momento no se comunicó así. "El objetivo es que la ciudad pudiera tener acceso de forma gratuita. Adicionalmente, y como gesto hacia el vecindario, se mandaron 1.000 invitaciones gratuitas", señalan a Metrópoli.

El centro puede visitarse desde el 24 de agosto hasta mayo de 2025 en el emblemático edificio IMAX, en el Port Vell. Después de 10 años cerrados, los viejos cines han vuelto a cobrar vida para alojar este espacio antes de la Copa América. El objetivo es atraer a 8 millones de visitantes en dos años, hasta 2025. En septiembre, 28.000 personas visitaron la exposición, según cifras de la organización.

En la exposición se han invertido 7 millones de euros para la reforma y la tecnología necesaria dentro del espacio. El centro sólo tiene la concesión de licencia hasta mayo de 2025, por lo que se desconoce todavía si permanecerá en un futuro en Barcelona.

PROPIEDAD DEL AMERICA'S CUP EXPERIENCE

La exposición está gestionada por Varia Investment Cultural, la filial museística de Stoneweg, fondo que acumula varios escándalos urbanísticos y denuncias de ecologistas. Stoneweg se asoció con la empresa AC House Barcelona SL, creada por los empresarios Josep GurriXavier Andrades y Enrique Ordóñez para poner en marcha este museo temporal.

Stoneweg es un fondo hispanosuizo fundado por los empresarios catalanes Joaquín Castellví y Jaume Sabater, quienes actualmente ocupan los cargos de director de inversiones y consejero delegado respectivamente. Castellví, cara visible del negocio en España, proviene de una acaudalada familia barcelonesa. El ejecutivo es hijo de Joaquim Castellví Rey, uno de los pioneros de la inversión inmobiliaria en el distrito 22@, con unos activos que superan las tres cifras en la empresa familiar Grupo CastellvíLos dos socios fundadores de Stoneweg cuentan con la ayuda del empresario Xavier Pujol Coll para su filial museística Varia Investment Cultural, donde este último consta como administrador único en el registro mercantil. 

Castellví y Sabater, miembros fundadores de Stoneweg

IMPACTO

El objetivo de la exposición es conectar a la ciudad con la vela antes de la edición número 37 de la Copa América. El campeonato empezará en Barcelona el 22 de agosto de 2024 con una ceremonia de inauguración, posteriormente se celebrarán las regatas previas a la competición y entre el 12 y el 27 de octubre, se celebrará el denominado Match. Está previsto que el evento genere un impacto económico de 1.200 millones de euros en la ciudad y cree un total de 19.000 puestos de trabajo. Por primera vez en 171 años de historia también se disputará una America’s Cup de mujeres. Y, de hecho, el centro neurálgico de la competición de la Women's & Youth America's Cup será el Port Olímpic barcelonés.

¿DESCONEXIÓN CON LOS BARCELONESES?

No obstante, la Copa América ya tiene a sus detractores oficiales en Barcelona. El pasado 10 de octubre se presentó la plataforma 'No a la Copa América', que aglutina a diversas entidades y asociaciones vecinales de la ciudad que se posicionan abiertamente en contra del evento. Lo consideran un “macroevento elitista" que apenas beneficiará a la ciudadanía, y resaltan las externalidades negativas de la competición deportiva. 

Noticias relacionadas