Estas son todas las estaciones fantasma del metro de Barcelona: algunas están intactas
Descender hasta estas paradas abandonadas del suburbano es como entrar en una verdadera cápsula del tiempo
7 agosto, 2024 09:31¿Sabías que el metro de Barcelona inauguró su primera estación en 1924? La antigüedad de este medio de transporte, el más utilizado por los barceloneses, esconde numerosas historias sobre él, que, paradójicamente, aquellos usuarios que lo usan diariamente desconocen.
Hubo un día en el que la capital catalana tuvo estaciones que actualmente no existen o que están fuera de servicio. Se las denomina ‘paradas fantasma’ y descender hasta ellas es como entrar en una verdadera cápsula del tiempo. Muchas se mantienen intactas desde hace décadas, guardando historias y secretos de la ciudad a varios kilómetros bajo tierra.
Estación de Fernando
Esta estación de vía única, construida en la Rambla, entre las paradas de Liceu y Drassanes, estuvo en funcionamiento entre 1946 y 1968. Algunos aseguran que el motivo de su creación fue la necesidad de disponer de un tren de refuerzo en caso de celebrarse algún evento especial en el Gran Teatre del Liceu.
La estación de Fernando contaba con un solo andén de 61 metros de largo. El acceso desde la calle se hacía a través de una única boca, ubicada en el cruce de la Rambla con la calle Ferran. Actualmente, está cerrada y solo se conservan algunos restos.
Estación Banco
Situada entre las paradas de Jaume I y Urquinaona, esta estación fue construida en 1911, coincidiendo con la apertura de la Via Laietana. Sin embargo, los trenes no empezaron a circular hasta 25 años después. La parada fue clausurada porque las dimensiones no eran las adecuadas y como los apeaderos de Jaume I y Urquinaona ya funcionaban, decidieron cerrarla. El andén de Banco se encuentra tapiado y actualmente sirve para guardar material de la vía.
Estación de Rocafort
La estación se inauguró en 1926 con el nombre de Rocafor como parte del primer tramo inaugurado del Metro Transversal. Posteriormente, en 1982, con la reorganización de los números de las líneas a la numeración arábiga, pasó a ser una estación de la L1 y se denominó Rocafort.
Durante la Guerra Civil (1936-1939) se usó como refugio. En la boca de acceso murió mucha gente fruto de los bombardeos de los aviones alemanes que sobrevolaban la Gran Vía de Barcelona. Por este motivo, muchos dicen que se trata de una estación maldita, donde los fantasmas campan a sus anchas por las vías de la estación.
Estación de la Bordeta
La parada, ubicada entre Mercat Nou y Santa Eulàlia, se inauguró en 1926 y formaba parte de la red de la línea 1. El apeadero de La Bordeta se cerró hace 42 años para alargar el recorrido hasta la Torrassa. Actualmente, esta estación fantasma se utiliza para llevar a cabo labores técnicas.
Estación de Correos
Otro de los apeaderos cerrados es el de Correos. La estación, abierta en 1934, está ubicada bajo la plaza de Antoni López y dejó de recibir pasajeros hace 50 años. Estuvo en servicio hasta marzo de 1972, cuando fue cerrada para permitir su prolongación hacia La Barceloneta.
La estación de Correos solo tenía un nivel por su proximidad al mar, en cambio, ofrecía una disposición muy peculiar: disponía de una sola vía y dos naves paralelas de 60 metros de longitud. En la actualidad, aún conserva carteles publicitarios de la época, entre ellos Danone, Muebles Asturias y Muebles La Fábrica.
Estación de Gaudí
La más conocida, aunque nunca llegó a abrir. Fue proyectada en 1960 para engrosar de la línea 2, pero al decidirse finalmente unificar las líneas 2 y 5, la estación perdió todo el sentido. En la actualidad, la parada se ha iluminado en múltiples ocasiones con decoración navideña. Además, se ha podido visitar en algún acto cultural y se ha aprovechado para poner la sede de la asociación de jubilados del metro.
Estación de Horta
La parada, ubicada entre El Clot y Sant Andreu Comtal, se inauguró en 1854 y con la construcción de la estación de La Sagrera en 1917 desapareció. Entre los años 1960 y 1970 estaba prevista su prolongación hacia la Vall d’Hebron y La Teixonera, aunque esta opción fue aparcada en los años 80.
Estación de Sant Bertran
La parada de Sant Bertran se abrió en 1881 y se clausuró la entrada de pasajeros 36 años más tarde. La estación, ubicada junto al muelle de Sant Bertran del Port de Barcelona, fue la terminal de la línea Barcelona-Vilanova. En la actualidad, en este espacio se levantan dos bloques de edificios del Laboratorio Regional de Aduanas de Cataluña y un bloque de viviendas de trabajadores del puerto.
Estación de Rodalies
Pertenecía a la Renfe y anteriormente a la compañía de los Ferrocarriles de Madrid a Zaragoza y Alicante (MZA). Ubicada entre los barrios de La Barceloneta y La Ribera de Barcelona, se ubicaba anexa a la estación de França y era la terminal de la línea Barcelona-Mataró-Massanet. El andén funcionó hasta que el ramal de Marina fue desmantelado, poco antes de los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992.